Choque entre los manteros y la policía en el Paseo de Gracia de Barcelona

Un grupo de vendedores ambulantes se ha rebelado este jueves ante a una actuación de la Guardia Urbana para expulsarles del Paseo de Gracia, el concurrido paseo barcelonés en el que los llamados manteros se posan con regularidad. De entre los cincuenta vendedores que había en la zona, según fuentes de la policía, la mayoría han salido corriendo -como suelen hacer ante la presencia de los agentes-, pero algunos de ellos se han concentrado en un punto, junto a una entrada del metro, y han arremetido contra la policía.

El enfrentamiento, ocurrido sobre las 13 h, se ha saldado con cuatro agentes heridos leves y un detenido, según fuentes policiales. Estas mismas fuentes han asegurado que los manteros han cargado con piedras contra los agentes, que al cabo de unos minutos han recibido refuerzos del cuerpo de antidisurbios.

Varias personas presentes, empleadas de los establecimientos del Paseo, han completado la versión policial con más detalle. “Los agentes, vestidos de paisano, han perseguido con porras extensibles a los manteros, que se iban a esconder en el metro. Luego han detenido a uno de ellos, y ha sido entonces cuando desde el metro han salido unos cuantos a enfrentarse con los agentes”, relata a Catalunya Plural José, vigilante de seguridad de una tienda ubicada en la acera del lado oeste del paseo, entre las calles Aragón y Consell de Cent, justo enfrente de la boca de metro.

Otra empleada de otra tienda muy cercana ha coincidido con su versión, y ha asegurado ver cómo la Guardia Urbana golpeaba con las porras extensibles a alguno de los vendedores. También ha visto como luego estos mismos, parapetados dentro de la entrada del metro, han lanzado piedras y objetos contra los agentes. “Las piedras eran negras, parecía que las hubieran cogido de la vía del tren”.

La lucha contra el 'top manta', una prioridad

La lucha contra el 'top manta', una prioridad

El cruce entre Paseo de Gracia y la calle Aragó es uno de los puntos favoritos para los manteros -se colocan a menudo a ambos lados del paseo- debido a la gran afluencia de turistas durante todo el año. No en vano en esa zona se encuentran tiendas de algunas de las principales marcas de ropa y perfumería, así como puntos de indudable interés turístico como la casa Batlló de Gaudí.

Allí es donde decenas de estas personas, la mayoría de origen subsahariano, colocan sus fardos llenos de gafas, bolsos, discos y demás objetos a la venta. Cada día conviven con las actuaciones policiales, y siempre cuentan con alguno de ellos que les avisa antes de que lleguen los agentes. A menudo se esconden en el metro, adonde la policía no suele ir a buscarles, según relatan los mismos testimonios de los hechos.

Una de las prioridades de CiU desde que accedió al Gobierno -incluso desde la oposición- ha sido eradicar la práctica de la venta ambulante -el llamado top manta- en las calles de la ciudad. Fuentes consistoriales admiten que sobre todo en verano la persecución de esta venta ilegal es una prioridad para el Gobierno municipal. En 2013 la Guardia Urbana impuso 74.227 denuncias a manteros y lateros, más de 4.000 más que el año anterior.