La CUP, 'comuns' y el PP reclaman las actas 'fantasma' del comité que gestiona la pandemia en Catalunya

Las nuevas medidas tomadas por el Govern catalán para contener la extensión de la COVID-19 han hecho reaccionar a diferente partidos de la oposición, que se han unido para cargar contra la gestión del comité que gestiona la pandemia, el Procicat, formado por los departamentos de Interior y Salut. Formaciones dispares, como la CUP, los 'comuns' o el PP, han exigido al Ejecutivo que haga transparentes las reuniones del Procicat y explique los criterios con los que se toman las decisiones sobre los confinamientos territoriales. También desde el Ayuntamiento de Barcelona consideran que, en la capital, el confinamiento comarcal impide la movilidad entre ciudades que están muy próximas, por lo que reclaman que el Área Metropolitana de Barcelona sea contada como una sola unidad por la que se permita el movimiento sin restricciones.

Las críticas se han desatado después de que este miércoles el Procicat decidiera retornar al confinamiento comarcal que había levantado justo antes de la Semana Santa. Esta circunstancia ha provocado que desde la CUP afirmen que se ha demostrado que el comité sigue criterios económicos, antes que sanitarios, y “salvaguardar los intereses de determinados lobbys económicos”. En este sentido, la formación reclama que el Procicat elabore actas y las haga púbicas, para conocer las motivaciones del Govern a la hora de decidir las restricciones. “Las decisiones tomadas parecen haber ido más encaminadas a salvar la Semana Santa que a la salvaguardar la salud pública”, resumen los anticapitalistas sobre su posición en un comunicado.

La cuestión de la ausencia de actas y la transparencia de las reuniones ha sido un asunto esgrimido por diferentes formaciones desde que este diario destapara una respuesta oficial del organismo en el que admitían no disponer de ningún tipo de documentación elaborada. Pero, tras las nuevas decisiones, este jueves En Comú Podem ha registrado ante el Parlament una solicitud para obtener copias de todas las actas elaboradas durante la pandemia. Junto a esta petición, el grupo ha registrado una batería de preguntas en las que reclaman, entre otras cosas, conocer los informes en los que están basadas las decisiones, así como una justificación de por qué se elige la comarca como unidad para confinar. Desde el Ayuntamiento de Barcelona, la alcaldesa Ada Colau reclama que se permita la movilidad por todo el área metropolitana, asegurando que así se evitan aglomeraciones.

También la diputada del PP, Eva Parera, se ha referido a la transparencia de las decisiones tomadas por el Procicat. “¿Empezamos a exigir?”, se ha preguntado la política, para enumerar: “Listado de personas que se reúnen para tomar las decisiones, informes y datos en los que se basan, datos del resultado de las medidas aplicadas”. Una información que la diputada ha reclamado porque, según ha añadido, “muchos negocios están cansados de hacer actos de fe sin saber si su ruina es de verdad necesaria”.

Más presión desde Barcelona para un perímetro metropolitano

El confinamiento comarcal nunca ha sido del agrado del Ayuntamiento de Barcelona, que ya en el mes de enero reclamó que el perímetro fuese único para la treintena de municipios del Área Metropolitana. La razón que aducen desde el consistorio, y que volvieron a poner sobre la mesa del PROCICAT este miércoles, es que la elevada densidad de la ciudad provoca que se generen aglomeraciones durante los fines de semana en zonas como la montaña de Collserola o el Paseo Marítimo. “Somos una ciudad extremadamente densa y el confinamiento comarcal no solo no evita situaciones de riesgo, sino que las provoca”, argumentaba la alcaldesa Ada Colau.

La consellera de Salud, Alba Vergés, descartó por ahora la opción pero aseguró que esta seguía sobre la mesa y que había que conocer la opinión de los demás alcaldes. Uno de ellos, Xavier Garcia-Albiol, de Badalona, se mostró favorable al perímetro metropolitano y no comarcal. “No podemos obviar que el área metropolitana es una realidad más lógica y por eso este debería ser el criterio de cierre”, apuntaba. Los demás municipios de la comarca del Barcelonès son Santa Coloma de Gramenet, Sant Adrià del Besòs y L’Hospitalet de Llobregat. Fuentes de este último consistorio aseguran que también se inclinan por un cierre de todo el área metropolitana. 

Quejas del sector turístico

El cierre comarcal anunciado por el PROCICAT también ha suscitado las críticas de aquellos sectores económicos que se benefician de la movilidad, como ocurrió en Semana Santa, especialmente el turístico y el de la hostelería. Xavier Guardià, portavoz de la Federación Empresarial de Hostelería y Turismo de Tarragona, aseguraba a ACN que han recibido numerosas cancelaciones para este fin de semana y el siguiente. “La Administración quizás está acostumbrada a hacer las cosas mal, pero los empresarios no”, defendía. “Volvemos a los inicios, nos dieron un caramelito por Semana Santa y ahora nos hacen cerrar. Esto es inviable, no es como apretar un botón y ya, somos una rotación en la que hay hoteles, proveedores…”, se lamentaba Magí Mallorquí, de la Asociación Hotelera de la Província de Tarragona, que aglutina 130 negocios. 

También se pronunció en contra la Asociación de empresarios de Castell d’Aro i S'Agaró (ADEM), que reclama que se revoque el confinamiento comarcal y se aplique uno “provincial” para “no cortar la ligera recuperación” de la Semana Santa. El sector asegura que la Costa Brava centro ha recuperado las cifras de visitantes de hace dos años y que eso les invita al “optimismo”, pero que las nuevas restricciones que entran en vigor este viernes pueden empeorar la situación. “Esta Semana Santa ha supuesto un punto de inflexión para el tejido empresarial de la zona, que busca estabilizar una situación que se había complicado poniendo en peligro el futuro de muchos negocios”, afirmaban en un comunicado.