El colapso del servicio de urgencias en algunos de los principales hospitales de Catalunya el pasado verano a raíz del cierre provisional de camas resuena después de que el Servei Català de la Salut (CatSalut) haya anunciado este jueves la clausura este verano de una media de 1.883 camas del total de 13.297. El secretario general de Metges de Catalunya (MC), Francesc Duch, celebra que en comparación con el verano pasado se mantengan hábiles 208 camas más pero advierte que se podría repetir el colapso del año anterior.
Los hospitales catalanes públicos deberán pasar el verano con un 14,16% menos de capacidad en número de camas, según los datos presentados este jueves por el director del CatSalut, Josep Maria Padrosa, ante la Comissió de Salut del Parlament. Si bien Padrosa ha subrayado que la adecuación funcional de los centros es transitoria y adaptable en todo momento a la presión de urgencias que se produzca, el secretario general de MC asegura a Catalunya Plural que teme que si desde la gerencia se muestra la misma rigidez que el año pasado a la hora de reaccionar ante un aumento de la demanda, se vuelvan a saturar las urgencias.
Como cada inicio de verano, Salut justifica la reducción temporal en el número de camas por la disminución de la demanda durante la temporada estival. Para Agustín Echevarria, enfermero y secretario general de la sección sindical de UGT en Bellvitge, el argumento del factor estacional no es suficiente. “Hemos tenido pérdidas importantes de camas estructurales, habrá que estar atentos a qué unidad se cierra y a la fecha de reapertura”, comenta a este diario. Datos oficiales sobre la atención hospitalaria en la región de Barcelona indican que el Hospital de Bellvitge contaba en 2010 con 906 camas hábiles mientras que en 2013 sólo disponía de 724. En el caso del Valle de Hebrón, el principal hospital de Catalunya en capacidad, en 2010 tenía 1.176 camas mientras que en 2013 la cifra disminuía a 1.017.
Padrosa ha apuntado este jueves que la reducción provisional de plazas de cara al verano se debe, entre otras razones, al incremento de la cirugía mayor ambulatoria (que no requiere el ingreso hospitalario), que ocupa seis de cada diez intervenciones quirúrgicas en Catalunya, según datos del CatSalut del mes pasado. Con todo, también ha anunciado que durante los meses de julio, agosto y septiembre, se reforzarán los equipos de atención primaria de los centros de la red sanitaria pública de Catalunya con una dotación de 300 profesionales, un 14% más que el verano anterior.
Con la mirada puesta en el verano pasado
El plan de Salut para este verano, que se iniciará a partir de la primera quincena de julio, prevé inutilizar una media de 1.883 camas, llegando hasta 2.747 camas la segunda quincena de agosto. Dicho de otro modo, la disponibilidad de plazas será del 85,84%, lo que supone un porcentaje ligeramente superior respecto al verano pasado, cuando la disponibilidad media fue del 83,79%.
Ante la presentación del plan de salud en el Parlament, la oposición ha reclamado que la clausura de plazas no repita el colapso vivido el último verano y que provocó que usuarios y personal sanitario de hospitales como el de Vall d'Hebron y el de Bellvitge -ambos del ICS- se unieran para impedir la clausura de plantas de hospitalización de camas que Salut había previsto para los meses de vacaciones.
Agustín Echevarría asegura que la gestión de la clausura provisional de camas en el Hospital de Bellvitge en 2014 fue “nefasta”. El enfermero critica que la antigua gerencia del centro gestionó el cierre con un “secretismo absoluto”. Aunque reconoce que es cierto que disminuye la actividad quirúrgica en general durante el período veraniego insiste en que el cierre no debe repercutir en las cirugías y que hay que mantener un buen nivel de actividad para que la población sea bien atendida.
Por su lado Francesc Duch coincide también en destacar que el verano pasado se vivieron situaciones “dantescas” con gente en los pasillos de los hospitales ya que, según explica, los gerentes “no fueron capaces de adaptarse a puntas de demanda que alcanzan niveles de afectación por la gente muy altos”.
Catalunya, por debajo de la media española en número de camas por habitante
Un informe elaborado por Salut concluye que en 2013 los hospitales de agudos públicos redujeron la dotación de camas y de personal con una disminución de la hospitalización, aunque se incrementó la cirugía, las visitas y las sesiones de hospital de día con un ligero incremento de la estancia media.
También, según recoge el documento y tomando datos de 2012 como referencia, Catalunya es la comunidad autónoma con un mayor número de centros hospitalarios públicos, aunque en número de camas por 1.000 habitantes está por debajo de la media española. Además, se observa que aunque Catalunya tiene menos dotación pública en camas por habitante tiene más actividad respecto de otras comunidades.
El colapso del servicio de urgencias en algunos de los principales hospitales de Catalunya el pasado verano a raíz del cierre provisional de camas resuena después de que el Servei Català de la Salut (CatSalut) haya anunciado este jueves la clausura este verano de una media de 1.883 camas del total de 13.297. El secretario general de Metges de Catalunya (MC), Francesc Duch, celebra que en comparación con el verano pasado se mantengan hábiles 208 camas más pero advierte que se podría repetir el colapso del año anterior.
Los hospitales catalanes públicos deberán pasar el verano con un 14,16% menos de capacidad en número de camas, según los datos presentados este jueves por el director del CatSalut, Josep Maria Padrosa, ante la Comissió de Salut del Parlament. Si bien Padrosa ha subrayado que la adecuación funcional de los centros es transitoria y adaptable en todo momento a la presión de urgencias que se produzca, el secretario general de MC asegura a Catalunya Plural que teme que si desde la gerencia se muestra la misma rigidez que el año pasado a la hora de reaccionar ante un aumento de la demanda, se vuelvan a saturar las urgencias.