El presidente del Govern, Salvador Illa, se ha reunido este viernes por primera vez desde que ocupa el cargo con el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, en el Palau de la Generalitat. El nuevo jefe del Ejecutivo catalán ha salido a las puertas del Palau para saludar a Collboni, en una escenificación de la nueva etapa política que se ha abierto en plaça de Sant Jaume con los socialistas al frente de ambas administraciones, algo que no ocurría desde que coincidieron el president José Montilla y el alcalde Jordi Hereu hasta 2010.
Illa y Collboni han mantenido un primer contacto en el que han priorizado el acceso a la vivienda y la mejora de la seguridad de cara al inicio del mandato del primero. También la necesidad de reforzar la red de transporte público y otros elementos de movilidad, o la mejora del espacio público y la calidad de vida en los barrios.
Ha sido una primera toma de contacto para marcar el orden del día de un encuentro más institucional previsto para el 4 de septiembre en el que abordarán la agenda conjunta. Ambas partes fijaron estas cuestiones para “garantizar el progreso social con una ciudad más habitable, próspera y saludable”, aseguraron fuentes del ejecutivo, con el horizonte de 2035.
Collboni tiene sobre la mesa la voluntad de mantener el decreto aprobado por el ejecutivo de Pere Aragonès para frenar los pisos turísticos. Necesita el aval del Govern para sacar adelante su promesa de eliminar en cinco años 10.000 pisos turísticos en la ciudad. Otras carpetas que tienen abiertas el ayuntamiento y la Generalitat son la modificación de la tasa turística, la limitación de los cruceros o la construcción de pisos sociales en Barcelona, que se detuvo al no aprobar los presupuestos de 2024.