Un juez de Barcelona investiga a Sandro Rosell por fraude fiscal

Un juez de Barcelona ha citado a declarar como imputado –investigado, según la nueva denominación– al expresidente del F.C. Barcelona Sandro Rosell, a raíz de una querella de la Fiscalía que le acusa de un fraude fiscal de 229.569 euros en el ejercicio de 2012, ha informado El Periódico de Catalunya y ha confirmado eldiario.es.

La nueva causa por fraude fiscal contra Rosell se une a la que tiene abierta en la Audiencia Nacional por blanquear presuntamente dinero de la Confederación Brasileña de Fútbol. El juez de instrucción de Barcelona ha admitido a trámite la querella de la Fiscalía, que acusa a Rosell de un delito contra la Hacienda pública, y lo ha citado a declarar como investigado para el próximo mes de septiembre.

La cantidad presuntamente defraudada por Rosell en su declaración individual del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) del ejercicio tributario 2012, año en el que presidía el Barça, asciende, según la Fiscalía, a 229.569,77 euros. En su querella, el fiscal acusa a Rosell de “ocultar las verdaderas cifras derivadas de su renta” mediante el control de una sociedad, TOC. SLU, dedicada oficialmente a la organización de eventos sociales y a la compraventa de inmuebles.

El mecanismo defraudatorio utilizado por Rosell, según el fiscal, fue deducirse indebidamente gastos a través de la sociedad que administraba. La sociedad, con sede en el domicilio del propio Rosell, carecía de estructura empresarial y sus únicos trabajadores eran cinco personas que se encargaban del mantenimiento y la limpieza de las oficinas y de la segunda residencia del expresidente del Barça, mantiene la Fiscalía en su querella.

A lo largo del ejercicio de 2012, añade el ministerio público, Rosell utilizó la empresa para obtener rentas que no declaró en su autoliquidación por IRPF y que derivaban de su actividad profesional. Según la Fiscalía, la empresa se dedicaba a emitir y cobrar facturas a clientes que eran del propio Rosell, con lo que se ocultaban los ingresos del empresario a la Hacienda pública.

La querella añade que, a lo largo de la investigación de este fraude fiscal, la Agencia Tributaria ha detectado dos ingresos de 13,5 y de 5,6 millones de euros que Rosell percibió en 2012, respectivamente, de Goldman Sachs y del Banco Rural de Brasil, cantidades que podrían elevar la cuota defraudada si se confirma que son ganancias patrimoniales no justificadas.

Asimismo, el ministerio público acusa al expresidente del F.C. Barcelona de no haber incluido en su declaración de 2012 la imputación de rentas inmobiliarias correspondientes a un inmueble situado en la provincia de Girona. El abogado del expresidente del FC Barcelona, Pau Molins, ha declarado a la agencia EFE que mantiene “criterios interpretativos diferentes” respecto a los de la Agencia Tributaria, por lo que considera que su cliente no ha cometido ningún delito contra la Hacienda pública en su declaración de IRPF de 2012.