La lista avalada por Carles Puigdemont para dirigir el PDeCAT a partir de ahora tendrá un nuevo tándem al frente. David Bonvehí, que era la mano derecha de Marta Pascal, será el presidente y la diputada al Congreso, Miriam Nogueras, será la vicepresidenta. El papel de Nogueras, afín a Puigdemont, será fundamental a la hora de fijar la estrategia del partido en las negociaciones con el PSOE. Su perfil es mucho menos conciliador para los intereses de Pedro Sánchez de lo que han sido diputados como Carles Campuzano o Jordi Xuclà.
Junto a Bonvehí y Nogueras habrá otros 28 representantes, 12 de los cuales integraban la anterior ejecutiva que lideraba Pascal. O sea que solo ella ha quedado fuera de la nueva cúpula que apadrina el expresidente de la Generalitat.
La inclusión del equipo de Pascal en la ejecutiva es una manera de intentar suturar las heridas que deja una asamblea en la que se ha evidenciado que la fractura en el partido es importante.
El sector crítico pretendía que los consellers Miquel Buch y Damià Calvet estuviesen en la dirección y para lograrlo intentó que las bases relajasen el régimen de incompatibilidades para los cargos. Pero la militancia ha votado en contra de facilitar su presencia en la nueva cúpula y solo podrán asistir a las reuniones sin ser miembros de la dirección.
Puigdemont ha estado siguiendo por teléfono las intensas negociaciones para configurar la candidatura. Entre los nombres que repiten en la dirección destacan Ferran Bel y Maria Senserrich. Entre los nuevos destaca la presencia de Marc Solsona, Lourdes Ciuró y Albert Alins.