La portada de mañana
Acceder
El PP explota la división parlamentaria para tumbar los impuestos a banca y rentas más altas
La vuelta a la rutina de las familias de los desaparecidos en la DANA
OPINIÓN | Feijóo y el cinismo de ‘Inside Out’, por Lucía Taboada

El comisario Ferran López avala el enfrentamiento de Trapero con el Govern: “Los Mossos estábamos desamparados”

Tras la tormenta del coronel Pérez de los Cobos ha llegado la calma del comisario Ferran López en el juicio al major Trapero en la Audiencia Nacional. El que fuera número dos de los Mossos d'Esquadra con Trapero como mando máximo ha avalado la versión del major sobre el enfrentamiento de la cúpula de la policía autonómica con el Govern a cuenta del 1-O. “Los Mossos estábamos desamparados gubernativamente”, ha lamentado López, que también ha salido al rescate de su antiguo jefe para recalcar que los Mossos siempre obedecieron las órdenes judiciales para impedir el 1-O.

López ha descrito la incomodidad de la jefatura del cuerpo autonómico a preguntas del fiscal Pedro Rubira. “Era una situación extraña porque estábamos bajo las órdenes de un gobierno que se situó fuera de la ley”, ha relatado López sobre los desencuentros entre la policía y los políticos en los días previos del 1-O. “La jefatura de los Mossos estaba delante de una pantalla de televisión sin saber exactamente qué hacía el Govern. No participábamos de reuniones ni se nos hizo llegar el alcance de las decisiones”, ha lamentado el comisario, que dirigió el cuerpo tras la aplicación del 155 y la destitución de Trapero.

El desamparo descrito por López se ha completado con una descripción gráfica: “Cuando el Govern convocaba una rueda de prensa nosotros estábamos en un sofá, se hacían silencios espeso, mirábamos las declaraciones del presidente y tomábamos decisiones. Esta era nuestra triste situación”. Todo ello no impidió, ha insistido López, que cuando la Fiscalía y el TSJ catalán ordenaron al cuerpo paralizar el referéndum los Mossos se pusieran a su servicio como policía judicial y se olvidaran de las discrepancias con el Govern.

Como ya hizo en el Tribunal Supremo, el comisario ha detallado de nuevo las dos reuniones en las que los mandos de la policía autonómica advirtieron a Puigemont y los entonces vicepresidente Oriol Junqueras y consejero de Interior Joaquim Forn de los posibles desórdenes públicos que se podían producir el día del referéndum. Según López, el major Trapero y los comisarios les “reprocharon algunas declaraciones” que estaban haciendo desde el Govern y que eran “injustas” para los Mossos porque “no reflejaban la postura real” del cuerpo, y el president contestó que si había “alguna degracia” el 1-O proclamaría la independencia.

Por lo demás, López ha reiterado y explicado sus contradicciones con el coronel Pérez de los Cobos sobre el operativo del 1-O. “Yo informó por correo cada dos horas de las actuaciones de los Mossos en los centros de votación”, ha resaltado López, que ha vuelto a contradecir a Pérez de los Cobos al afirmar que los Mossos sí informaron al coronel de la presencia de una patrulla de agentes de la policía autonómica en los centros, si bien ha admitido que quizás no empleó el término “binomio”.

Al igual que el major, López ha reconocido este miércoles que había un plan “no escrito” por si recibían la orden de detener al expresidente catalán Carles Puigdemont y que solo lo conocían “un reducido grupo” de mandos, pero que no fue trasladado a jueces y fiscales. “Nos pusimos a su disposición, creo que no era relevante comunicar si la detención se haría en helicóptero o con los grupos especiales”, ha justificado.

López, en línea con la autocrítica desplegada por Trapero, ha desvinculado el fracaso del operativo del 1-O con cualquier intención de la policía autonómica para facilitar la votación. De hecho, ha culpado a los cuerpos estatales de actuar de forma autónoma sin informar a los Mossos, en contra de lo acordado. “Cuando veo las primeras intervenciones de Policía Nacional llamo al señor Pérez de los Cobos y me dice que no sabe lo que está pasando y que ya me informará”, ha explicado.

Sobre la actuación de los Mossos el mismo día del referéndum, López ha reconocido que no puede estar “contento” del grado de cumplimiento de la orden de impedirlo, pero ha recalcado que era “difícil de cumplir” por el número de efectivos de que disponían. “No podemos estar satisfechos. Se hizo de la manera que pudimos”, ha afirmado. Ante la insistencia del fiscal Rubira, López ha defendido que actuar con proporcionalidad es “compatible” con cumplir las órdenes judiciales. Es más, ha remarcado que en los días previos al 1-O debía “operar todavía más el principio de prudencia”. “Pensábamos que eran días muy difíciles, inestables y debíamos actuar con proporcionalidad”, ha aseverado.

Y respecto a la protesta independentista frente a la conselleria de Economía el 20 de septiembre de 2017 que dificultó la salida de la comitiva judicial que llevaba a cabo un registro judicial en el departamento, López ha admitido que hubo una “desatención fornal” de los Mossos a los requerimientos de ayuda que la Guardia Civil hizo el 20-S por los canales oficiales, si bien ha matizado que sí se atendieron “de forma inmediata” todas las peticiones de ayuda que el coronel de la Guardia Civil Mariano Martínez hizo por vía telefónica.

“Las 38 peticiones de ayuda del coronel Martínez se articulan de inmediato”, ha insistido López, que ha desligado a la intendente Teresa Laplana, acusada en el juicio, de cualquier decisión sobre el operativo. Sobre la salida de la comitiva judicial que realizó el registro por un teatro anexo al departamento, López ha señalado que fue una “vía alternativa” para sacar a los agentes y la secretaria judicial de la conselleria. “No era la vía que habríamos querido pero por el ambiente en la entrada de la conselleria era la solución para salir del paso”, ha defendido.