Forn se desmarca de Junqueras: “La independencia se tenía que declarar dos días después del 1-O y no se hizo nada”
Dos declaraciones de acusados por el 1-O y dos estrategias opuestas. El exvicepresident Oriol Junqueras ha reivindicado su papel en la organización del referéndum y ha llegado a expresar su intención de “asumir las responsabilidades que se me quieran atribuir para que no las asuma nadie más”. Por contra, el exconseller de Interior Joaquim Forn se ha desvinculado por completo de los trabajos de preparación del referéndum y ha limitado su apoyo del 1-O a un “compromiso político”.
Las distintas estrategias de los exconsellers se han evidenciado desde el inicio de sus respectivas declaraciones. Mientras Junqueras ha declinado responder a las preguntas de las acusaciones para dejar claro que está ante un “juicio político”, Forn ha aceptado responder a la Fiscalía y a la Abogacía del Estado.
Forn ha centrado la primera parte del interrogatorio en desmarcarse del 1-O. No solo se ha separado ostensiblemente de la reivindicación y asunción de la votación realizada por el Junqueras sino que rebajado su apoyo al 1-O a un “compromiso personal” separado totalmente de su posición institucional como conseller.
“Yo diferencio muy claramente mis actuaciones como conseller de mi compromiso político con el referéndum”, ha sostenido Forn, que ha insistido en “separar las manifestaciones políticas de las obligaciones de la policía”. “No se ejerció ninguna actividad desde mi departamento en favor del referéndum”, ha zanjado. Por contra, Junqueras ha asumido el impulso político del 1-O (aunque no ningún gasto público) en base al “mandato” electoral de las elecciones de 2015 y al derecho a la autodeterminación de Catalunya.
Por la tarde, cuando se ha retomado su declaración tras un receso, Forn todavía ha sido más contundente en abjurar de la vía unilateral. Para ello no ha tenido problemas en exponer todas las renuncias y los incumplimientos que los independentistas cometieron de sus propias leyes y promesas. En primer lugar, a preguntas de su abogado, Xavier Melero, Forn ha negado que percibiera la declaración de independencia del 27-O como “el nacimiento de un nuevo Estado”.
Frente a la vehemencia de Junqueras, que ha proclamado que la promover la independencia “no es delito”, Forn ha rebajado la Declaración Unilateral de Independencia del 27-O a una “declaración política”. De hecho, ha recordado que la ley del referéndum preveía que el Parlament declararía la independencia dos días después del 1-O, algo que no pasó. “No se hizo nada”, ha constatado, para a renglón seguido recordar que “nadie” en el Govern pidió que se actuara conforme lo que decía la ley del referéndum.
El exconseller ha reiterado en varias ocasiones que su prioridad fue buscar el diálogo con el Estado y ha abjurado de la vía unilateral. En este sentido, Forn ha destacado que el Govern no opuso “resistencia” a la aplicación del artículo 155 de la Constitución que comportó su cese. También ha destacado que el Govern no hizo ninguna resolución ni ningún acto administrativo para desarrollar la independencia.
Los Mossos no recibieron órdenes
En lo que sí han coincido ambos exdirigentes es en negar órdenes políticas a los Mossos d'Esquadra para facilitar el 1-O, una de las principales acusaciones de la Fiscalía. A preguntas del fiscal Fidel Cadena, el exconseller ha subrayado que los Mossos d'Esquadra, en una reunión de sus mandos con Puigdemont, Junqueras y Forn, no advirtieron al Govern de “un escenario de violencia generalizada” sino que “solo nos manifestaron su preocupación por incidentes puntuales”, tanto en el caso de que se celebrara el 1-O como si se suspendía. Además, Forn ha manifestado que todos los presentes estuvieron de acuerdo en que los Mossos debían impedir el 1-O, tal y como les había ordenado el TSJ catalán.
Asimismo, Forn ha reivindicado la labor de los Mossos para impedir que se abrieran centros el 1-O en los días previos a la votación con datos concretos: el 29 de septiembre las patrullas de la policía catalana, ha explicado Forn, visitaron 828 centros y redactaron 551 actas en las que se informaba a las personas concentradas en los colegios del auto del TSJC que ordenaba a los Mossos impedir el 1-O.
Al día siguiente, ha continuado Forn, los Mossos siguieron visitando los centros donde ya había votantes concentrados y rellenaron 3618 actas. “A partir de estos avisos se consiguió que no se abrieran 297 colegios. Dimos cumplimiento a todos requerimientos de jueces y fiscales”, ha resaltado.
Rifirrafes con el fiscal
Al responder a las preguntas de las acusaciones, Forn ha protagonizado algunos rifirrafes con el fiscal Fidel Cadena. El exconseller no ha escondido una expresión de descontento cuando el fiscal le ha preguntado si era socio de Òmnium o la ANC, a lo que Forn ha respondido de forma afirmativa. Tampoco le ha gustado a Forn que le preguntara por su detención en 1992 cuando intentó entrar una bandera catalana en el Estadio Olímpico de Barcelona.
Otro momento de tensión se ha producido cuando Cadena ha pregunta a Forn si sabía que la secretaria judicial tuvo que abandonar la conselleria de Economía el 20 de septiembre de 2017 “saltando tejados” por el cerco ciudadano. “He leído sus escritos y ustedes construyen unos relatos que son un poco peliculeros”, ha replicado Forn. Según el exconseller fue la propia secretraria la que pidió salir “por un sitio que fuera seguro y se le mostró la alternativa” del cine Capítol, anexo a la conselleria.
Respecto el 20-S, Forn tampoco ha escondido su malestar por el hecho de que, según su versión, la Guardia Civil no avisó a los Mossos d'Esquadra del operativo que comportaría 40 entradas y registros, lo que impidió generar un dispositivo para proteger a la comitiva judicial. “Si se hubiera tenido confianza en el cuerpo de Mossos d'Esquadra nos hubiéramos ahorrado algún problema”, ha censurado.