La Mesa del Parlament no ha admitido a trámite este martes la propuesta para modificar la ley de la presidencia de la Generalitat, impulsada por JxCat para permitir la investidura a distancia de Carles Puigdemont. El presidente Roger Torrent ha aplazado la decisión hasta que se pronuncien los letrados, después de llegar a un acuerdo con JxCat per reclamar un informe técnico sobre la propuesta.
El pulso entre los partidos independentistas por esta cuestión ha vuelto a llevarse a la Mesa, que en la pasada reunión chocaron después de que el presidente Roger Torrent no hubiera incluido la petición en el orden del día. En aquella ocasión se adujeron motivos de forma. JxCat quiere abrir todas las vías posibles para investir a Puigdemont, mientras que ERC se resiste.
En la reunión de este martes la cuestión sí había sido incorporada al orden del día, pero la admisión a trámite has sido aplazada en una reunión larga que ha vuelto a tensar las relaciones entre ambas formaciones. ERC considera que esta reforma no sirve para esquivar al Constitucional y aduce que su mera tramitación podría conllevar consecuencias penales, después de las medidas cautelares impuestas por el tribunal.
Por esta razón ambos partidos han acordado reclamar un informe a los letrados sobre las implicaciones legales de esta reforma a la vista de las medidas cautelares del TC. En su último auto, el Constitucional no solo prohibió al Parlament no solo investir a Puigdemont a distancia sino también iniciar trámites que pudieran llevar a la investidura a distancia de Puigdemont. Esto último es precisamente lo que busca la reforma que promueve JxCat. Los independentistas quieren saber, por tanto, si el Alto Tribunal cercenó las competencias del Parlament para legislar sobre esta cuestión y si tramitar la reforma podría interpretarse como desobediencia.