Comunidad Valenciana Opinión y blogs

Sobre este blog

La portada de mañana
Acceder
El juez Peinado exprime la causa contra Begoña Gómez y cita ahora a Pedro Sánchez
OPINIÓN | 'Que no pare el espectáculo Peinado', por Esther Palomera
CRÓNICA | Una guerra de cien días para impedir la victoria de Trump

Mero

Aunque los peces suelan tener un nombre en cada puerto, en este que vemos, Epinephelus marginatus, hay bastante unanimidad y se le llama mero. Fue Covarrubias en 1611 quien registró este nombre en alusión a “Nero”, Nerón, pensando en la voracidad del mero. Se dan para este pez unas medidas exageradas muchas veces, porque es verdad que a lo mejor antes eran más grandes, pero ahora es muy difícil encontrar uno que pese más de 40 kilos. Por mucha voracidad que digan que tiene por su nombre de mero, han llegado a ponerle nombre propio, como a un mero que había o hay a lo mejor todavía en Almuñecar, al que llamaban Paco, y también algún otro que llamaron Baldomero. Los ejemplares que tienen mayor tamaño son machos, porque son hermafroditas los meros y primero son hembras y luego machos. Este que vemos ya tiene su librea y es un gran macho. Cabría preguntarse si no sería mejor que se llamaran como en todas en partes: mero.

Aunque los peces suelan tener un nombre en cada puerto, en este que vemos, Epinephelus marginatus, hay bastante unanimidad y se le llama mero. Fue Covarrubias en 1611 quien registró este nombre en alusión a “Nero”, Nerón, pensando en la voracidad del mero. Se dan para este pez unas medidas exageradas muchas veces, porque es verdad que a lo mejor antes eran más grandes, pero ahora es muy difícil encontrar uno que pese más de 40 kilos. Por mucha voracidad que digan que tiene por su nombre de mero, han llegado a ponerle nombre propio, como a un mero que había o hay a lo mejor todavía en Almuñecar, al que llamaban Paco, y también algún otro que llamaron Baldomero. Los ejemplares que tienen mayor tamaño son machos, porque son hermafroditas los meros y primero son hembras y luego machos. Este que vemos ya tiene su librea y es un gran macho. Cabría preguntarse si no sería mejor que se llamaran como en todas en partes: mero.