El Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tardó cuatro meses en dar cita a Ximo Puig tras su investidura como President de la Generalitat, y para la fecha que lo hace además tiene una agenda plagada de visitas oficiales. Así la jornado en la residencia del presidente comienza a las 10h con la recepción del candidato de Izquierda Unida para las próximas elecciones, Alberto Garzón; posteriormente a las 13h llegará el turno para la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes; no será hasta las 17h cuando llegará el turno para Puig, el que menos tiempo de margen de entrevista tendrá, puesto que en hora y media, a las 18,30h, está programado el encuentro con el Presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla.
Muchas han sido las quejas que han habido desde el gobierno valenciano sobre el retraso de la fijación de la entrevista, y especialmente cuando esta tiene lugar con las cámaras ya disueltas de cara a las Elecciones Generales del 20 de diciembre y con Rajoy como presidente en funciones, lo que ha llevado a Ximo Puig a decir que esta entrevista se produce en el “tiempo de la basura”. No obstante cabe recordar que por el camino Rajoy sí ha encontrado espacio para reuniones urgentes en Moncloa como las desarrolladas la pasada semana referidas a la declaración del proceso de independencia del Parlament de Catalunya, cuando sí hubo espacio para que el Presidente del Gobierno se entrevistara con el líder del PSOE, Pedro Sánchez, con el de Ciudadanos, Albert Rivera, y después -tras las críticas recibidas- también encontrara tiempo para ver a Pablo Iglesias, de Podemos.
“Financiación transitoria”
Ximo Puig llegará a la Moncloa con reivindicaciones y con un puñado de reproches a Mariano Rajoy que ya verbalizó la semana pasada en les Corts al considerar al todavía presidente del gobierno que había cometido “discriminación y deslealtad” con la Comunitat Valenciana, fundamentalmente por el retraso de la entrevista y por la cuestión de la financiación.
Precisamente este último, el tema de la financiación valenciana, será la cuestión central del encuentro entre ambos presidentes. Así mientras Rajoy y el PP no se quieren comprometer en el tiempo y emplazan a la próxima legislatura para abordar la reforma de la financiación autonómica de forma global en todo el Estado, la Generalitat Valenciana van a reclamar los millones de déficit que consideran se les escatiman desde Madrid. Como muestra de la urgencia con la que el gobierno valenciano aborda el tema hay que ver los presupuestos para 2016 presentados la semana pasada, donde se cuenta con los 1.300 millones que Puig reclamará este lunes a Rajoy.
Según afirmo Puig este domingo “la Comunitat Valenciana no puede aguantar ni un minuto más sin una financiación adecuada para prestar los servicios públicos que se merecen los valencianos”, por lo que va a reclamar “una financiación transitoria para el 2015 y una definitiva a partir de 2016, porque no podemos continuar estando al furgón de cola porque eso repercute muy negativamente en el empleo y en el bienestar social de los valencianos”.
Refugiados
Otro de los temas que Puig planteará a Rajoy es el de los refugiados, porque el jefe del Ejecutivo valenciano considera que es “absolutamente absurdo prohibir la solidaridad”. Según el President “de lo que se trata ahora es de que el señor Rajoy admita que la Generalitat pueda fletar ese barco (para traer refugiados sirios), desde luego coordinadamente con el Gobierno de España y con las entidades locales que se han puesto a disposición para lograr la acogida de la mejor manera posible”.
Cabe recordar así que incluso desde la ONU, la representante de ACNUR ha felicitado a Ximo Puig por dicha iniciativa del barco solidario que en su momento vetó el gobierno de Rajoy.
Catalunya
Por otro lado un tema que puede no pasar desapercibido es Catalunya. En esto Puig se ha mostrado contrario al proceso independentista asegurando que la secesión sería perjudicial tanto para Catalunya como para España. No obstante en otros aspectos las palabras de Puig se contraponen más a las de Rajoy, e incluso han chocado con la postura de su partido, el PSOE, como cuando el President de la Generalitat se mostró partidario de reconocer a Catalunya como “nación”, o el hecho de que la pasada semana PSPV, Compromís y Podemos tumbaran una declaración institucional en favor de la unidad de España que presentó el PP valenciano y que únicamente obtuvo el apoyo de Ciudadanos.