Noticia de un cisma

13 de noviembre de 2021 11:08 h

0

“ Soterrem ja sota el perfum de l’alba

els odis i l’enveja, les mentides...

Que els nostres fills coneguen el miracle

que en va hem buscat entre amargor i cendra.“

Jaume Bru i Vidal. Sagunt, 1959

En lo que va del 28 de octubre al 4 de noviembre se ha reunido la cumbre empresarial de Zaragoza y ha tenido lugar en el paraninfo de la Universidad de València, la conferencia:“La Transició al País Valencià. Violència, represió postfranquista i blaverisme” con la intervención de Josep Lluís Albinyana y Borja Ribera. Moderó Rosa Solbes. Desde la aparición en escena del candidato del PP a la presidencia de la Generalitat, Carlos Mazón, el discurso anticatalanista se ha recrudecido como idea-fuerza para sacar a Ximo Puig del Palau del carrer dels Cavallers. Un zaplanista de Alicante para tapar la corrupción.

Inicio de la trifulca

En 1907 se produjeron los primeros altercados, al bajar del tren, entre miembros de Solidaritat Catalana y los matones blasquistas comandados por el gaditano Felix Azzati (1874-1929). Lo que se inició con espíritu literario y cultural en el marco del movimiento “renaixentista”, acabó en enfrentamiento callejero con calado político. De la manera en que lo hacen los grupos de extrema derecha-- UCD por medio-- desde 1975 hasta ahora. El anticatalanismo va asociado a la virulenta reacción, una vez iniciada la Transición, contra el valencianismo de corte estratégico que lideraron los financieros del Banco de València: Ignasi Villalonga Villalba --amigo de Francesc Cambó-- y Joaquim Reig Rodríguez, antes de 1936. Convencidos de que la colaboración entre los intereses políticos-económicos valencianos y catalanes redundaría en beneficio de ambos territorios y de sus empresarios. La convicción y la aproximación se repite después de más de cien años.

Catalunya aparte

Hay demasiado ruido en la política. Los ciudadanos de a pie comprueban que algo no cuadra en el establecimiento de alianzas para diseñar el porvenir del País Valenciano. En los recientes movimientos queda sin ajustar la pieza de Catalunya. Los últimos en probar fortuna han sido los empresarios. Han convocado un cónclave en Zaragoza (28-10-2021) en connivencia con el PSOE, con la Corona de Aragón como telón de fondo. Vuelta a los orígenes. Los reinos de Castilla y Aragón conformaron el embrión del Reino de España en 1498 con el vínculo matrimonial de Fernando e Isabel. Nos enfrentamos al nudo gordiano de la financiación justa para las autonomías de 2021. ¿Qué es la Corona de Aragón sin Catalunya? Sin la Catalunya política, aunque se disponga de una parte de la Catalunya empresarial. ¿Y si la Catalunya empresarial de Foment del Treball, de Josep Sánchez-Llibre, carece del respaldo superior al 60% del PIB catalán? El que representan las pequeñas y medianas empresas (PIMEC) de aquel territorio.

Dos eventos y un hecho

En tierras valencianas se suceden dos episodios destacables y un hecho. Acontecimiento que es la crónica de un fracaso en dos actos: la impotencia para conseguir la financiación justa del País Valenciano y el bluf de que el Corredor Mediterráneo ferroviario quedará finalizado en fecha conocida. El Corredor tiene resistencia política de las fuerzas centrípetas. No funciona porque no quieren. Los episodios relevantes vinculan a la más alta autoridad valenciana en dos momentos estelares. Los primeros pasos de la preautonomía, en 1979, bajo la presidencia del primer Consell del País Valencià, de Josep Lluís Albinyana Olmos, y el congreso del PSOE de la Comunitat Valenciana (13-11-2021) --¿por qué en Benidorm, madriguera del zaplanismo?-- para reafirmar a Ximo Puig como candidato socialista a las próximas elecciones autonómicas. No más allá de 2023. La reaparición del ex-president Albinyana casi siempre incomoda a los factótums de la política oficial, a ambos lados del bipartidismo vigente. Albinyana,--rechazó la Alta distinción de la Generalitat actual-- renegado del PSOE y afín al valencianismo “enrragèe”, muestra el perfil resbaladizo del presidente destronado. Después de 400 días de dar la cara en la etapa preautonómica. Para poner las primeras piedras en la recuperación de la Generalitat Valenciana. Es bochornoso e injusto pagar a los que nos precedieron con olvido y desdén. ¿Qué hicieron los catalanes con Tarradellas y los vascos con Aguirre o con Leizaola?

Empresarios al quite

Ante la incapacidad de la entente del Botànic (PSOE- Compromís- Podemos), para conseguir que se equilibre la financiación entre las autonomías --mejor y peor dotadas-- las patronales integradas en CEOE han decidido tomar la batuta para formar un frente común con los territorios de Aragón, Catalunya, Baleares y la Comunitat Valenciana, que representan el 40% del PIB del Reino de España. La reunión de Zaragoza contó con la participación activa de la Confederación Empresarial Valenciana que preside Salvador Navarro, acompañado del president de la Generalitat, Ximo Puig. Junto con parte de los representantes patronales de Aragón, Catalunya y Baleares. Por las islas asistió la presidenta, Francina Armengol, y por la autonomía aragonesa, su presidente y anfitrión, Javer Lambán, ambos del PSOE. Se constató la ausencia del presidente catalán, Pere Aragonés. Disconforme con la convocatoria, por el protagonismo de las patronales en connivencia con los tres presidentes socialistas. En desacuerdo por la incorporación de Aragón, que desfigura el carácter “mediterráneo”. Los partidos aragoneses son centralistas. Alejados de las reivindicaciones históricas de los territorios periféricos que se reconocen como miembros activos con intereses comunes en el Arco Mediterráneo. Nada que ver con lo que se hizo ver en Barcelona con la propuesta de Ximo Puig, refrendada en València, para constituir la “Commonwealth” mediterránea, cuyo eje ferroviario sería el Corredor Mediterráneo. Al que ya se ha añadido el eje Cantábrico, que interesa a Aragón e hipotéticamente al Puerto de València, según su presidente Aurelio Martínez.

Vía bilateral

Desde que se ha consumado la presidencia de ERC de la Generalitat de Catalunya en la persona de Pere Aragonés, cada día que pasa se comprueba que la forma y el método de gobierno, auspiciado por Oriol Junqueras, se aproxima al ejercitado por el PNV en Euskadi. La estrategia del Gobierno vasco se desmarca de las negociaciones multilaterales de las demás autonomías para aplicar los argumentos de equiparación entre territorios y nacionalidades de entidad y peso--económico histórico y político-- muy diferente. A partir de la influencia del País Vasco y de la necesidad que tiene el gobierno PSOE-Podemos, del apoyo parlamentario del PNV, encabezado por Iñigo Urkullu, este partido solo dialoga bilateralmente, entre Estado Español y Gobierno Vasco. Esta es la vía escogida por Aragonés y Junqueras para Catalunya. Con la incapacidad de políticos y empresarios valencianos para sumarse a la reivindicación conjunta con Catalunya, de la financiación justa para la Comunidad Valenciana, el Gobierno valenciano ha vuelto a la casilla de salida. Con la aprobación inicial del Estatut de Autonomía por el artículo 143, en vez de ir por el artículo 151. Autonomías de primera y de segunda.. Entre las autonomías históricas y la que no fue considerada como tal: el País Valenciano. Absurda afrenta.

La línea recta

Lo que comenzó como una estrategia político-económica en torno a la operación Corredor Mediterráneo de ferrocarril --para conectar el País Valenciano con la frontera francesa-- ha terminado en un cisma entre valencianos partidarios del progreso y la razón en los flujos comerciales y quienes están comprometidos --PP. Vox y Ciudadanos-- en una lucha sin cuartel para hacerse con los resortes del poder y mediatizar las instituciones. Las vacilaciones y los contrasentidos han llevado a los núcleos de poder --ERC, Generalitat de Catalunya, PIMEC,Junts x Cat-- a sospechar que se trata de una operación --la apuesta por la entente de intereses catalanes y valencianos-- capciosa para favorecer los intereses electorales socialistas y de posicionamiento ante las patronales. Sólo para mejorar las expectativas de Ximo Puig y del PSOE en las encuestas. Conscientes de que no se va a culminar, a corto plazo, el Corredor Mediterráneo ni la financiación justa del País Valenciano.