El último escollo para finalizar la primera fase del Parque Central quedará salvado a partir del próximo martes 8 de mayo.
Esa es la fecha en la que el concesionario de coches ubicado entre la plaza Manuel Sanchis Guarner y el puente Iturbi deberá dejar completamente desalojados los terrenos anexos para su desmontaje y derribo, una vez finalizado el plazo de tres semanas concedido el pasado 17 de abril, tras la ejecución del deshaucio autorizado por el juez.
La mencionada parcela que el concesionario utilizaba como depósito de vehículos fue expropiada por el Ayuntamiento vía reparcelación y tras un largo litigio, los juzgados avalaron la actuación municipal y ordenaron el desalojo del recinto, que pasará a formar parte del Parque Central, en concreto, en esa parcela está previsto el Jardín de los Niños, en los que se debe completar una fuente y un canal.
Uno de los efectos complementarios especialmente beneficiosos para los vecinos más próximos a los terrenos del Parque Central ocupados por el concesionario de automóviles será la retirada del fibrocemento de los tejados de sus instalaciones, unos trabajos que podrán iniciarse a partir del 8 de mayo.
De hecho, fuentes de la sociedad Parque Central han informado que la constructora y la dirección de obra ya han podido acceder a las parcelas para hacer una estimación de la carga de trabajo que puede suponer la retirada de fibrocemento que hay en cubiertas y bajantes de parte de las instalaciones del taller, así como verificar sus características y estado.
Los tejados de fibrocemento ocupan unos 1.100 metros cuadrados. A ello habrá que añadir los elementos más lineales como las tuberías y conductos.
El fibrocemento está prohibido en España desde el año 2002. Este material se fabricaba hasta entonces con polvo de amianto blanco cuya nocividad está calificada por la Organización Mundial de la Salud por su incidencia en el riesgo de diferentes cánceres por inhalación de sus partículas.
El procedimiento para efectuar estos trabajos contempla rigurosas medidas para la protección de los operarios, del medio ambiente y para el transporte y almacenamiento de los residuos.
La actividad debe por este motivo contar con la preceptiva autorización, control y supervisión de la correspondiente autoridad laboral y ambiental, en este caso la Conselleria de Medio Ambiente.
En las obras de urbanización del parque ya se han realizado trabajos de retirada del fibrocemento que había en las antiguas edificaciones ferroviarias antes de acometer su rehabilitación.
Además de la retirada del fibrocemento, otras de las actuaciones inmediatas tras la disponibilidad de las parcelas del concesionario es la realización de catas y sondeos que determinarán si hay o no contaminación en el suelo, un trámite que exige la ley en terrenos afectados por determinados usos o actividad industrial como en este caso la realizada por el concesionario de vehículos.
Los residuos más frecuentes en terrenos donde se han desarrollado actividades relacionadas con la automoción suelen ser aceites y carburantes.
La Sociedad, como agente urbanizador, ha iniciado los trámites para la contratación de estos estudios que permitan definir qué tipo de residuos hay y dónde se localizan.
Tras el análisis en laboratorio del material extraído con las catas y sondeos se podrá saber si el suelo está contaminado o no. Si lo estuviera, será necesario realizar una valoración de riesgos y propuesta de las tareas a realizar para descontaminar.
Tanto la retirada del fibrocemento como los estudios de caracterización ambiental del suelo, - y las tareas de descontaminación si fueran necesarias- son tareas previas necesarias antes de poder programar y acometer las obras del parque que no se han podido ejecutar hasta ahora debido a la demora del concesionario a abandonar las parcelas.
Mientras tanto, se trabaja para poner en servicio el parque en las mejores condiciones dentro del último plazo de contrato solicitado por la UTE Pavasal-Dragados para finales de julio y aprobado por la Comisión Ejecutiva el pasado mes de febrero debido un problema con el suministro de la piedra natural para el revestimiento de fuentes y canales de agua.
En cuanto a la fecha de apertura al público del Parque, fuentes municipales han explicado que tras finalizar las obras se iniciará el proceso de recepcionamiento de las obras en virtud del cual los diferentes servicios municipales deberán dar el visto bueno a todo lo ejecutado (jardinería, fuentes, riego, etc).
Una vez finalice este proceso y las obras se hayan recepcionado, se abrirá el parque independientemente de que no hayan finalizado los trabajos en la parte del concesionario.
La primera fase del Parque Central que se asienta sobre una parcela de 110.000 metros cuadrados recayente a las calles Filipinas, Peris y Valero y Malilla y supone un 40% del total del jardín, que contará con 1.000 árboles y 85.000 arbustos.