La dirección nacional de Ciudadanos ha exigido este viernes a los cuatro diputados de las Corts que dejan el partido y el grupo parlamentario que renuncien a su acta porque aunque les pertenezca legalmente, “moralmente” supone “robar al partido y a los votantes” si permanecen en sus escaños.
Así lo ha apuntado en el Congreso el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, quien además espera que la marcha de estos parlamentarios del grupo de C's no esconda un “transfuguismo en mayúsculas” porque acaben apoyando al gobierno tripartito de la Comunitat Valenciana.
El exportavoz de Ciudadanos en las Corts, Alexis Marí, así como los diputados David de Miguel, Domingo Rojo y Alberto García anunciaron ayer que dejan el partido y el grupo parlamentario y pasarán a formar parte del grupo de no adscritos por desavenencias con la dirección del partido.
Villegas ha apuntado que en un partido las discrepancias internas son lógicas pero quien las tiene y está “en minoría” debe decidir si sigue trabajando en la organización respetando lo que decide “la mayoría” u opta por irse y dejar los cargos que tenían representando a la organización.
“No es legítimo argumentar y poner ciertas discrepancias para justificar robar el escaño y el sueldo de cargo público que corresponde al partido”, ha dicho el número dos de Ciudadanos.
Y ha admitido que aunque les pertenezca legalmente el escaño, moralmente lo están “robando” tanto a militantes como a votantes, y ese empeño en quedarse para “mantener el sueldo” público “deslegitima cualquier crítica”.
Villegas ha anunciado que la dirección nacional de Ciudadanos tomará “todas las medidas” que tenga a su alcance para evitar que se produzca es “transfuguismo con mayúsculas”. “Estaremos vigilantes”, ha dicho.