Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

“La sociedad no se puede permitir que Esquerra Unida quede fuera de las Corts Valencianes”

La coordinadora general de EUPV, Rosa Pérez Garijo

Miguel Giménez

Valencia —

Rosa Pérez Garijo (Valencia 1972) es licenciada en Derecho y en Ciencias Políticas, abogada y profesora asociada en la Facultad de Derecho de la Universitat de València, concejala por EUPV en el Ayuntamiento de Catarroja y diputada provincial, está afiliada a CCOO-PV y desde el pasado sábado es la coordinadora general de Esquerra Unida. Afín al sector de Alberto Garzón, la responsable de Inclusión Social, Teatros y Memoria Histórica en la Diputación de Valencia se imponía este fin de semana a la candidatura encabezada por Rosa Albert, avalada por el PCPV y que contaba como número dos con el exlíder de la formación, el controvertido David Rodríguez.

Esquerra Unida tiene una dirección al fin después de seis meses de interinidad, pero ¿sigue estando EUPV partida por la mitad?

Yo creo que no. Es normal que con dos posiciones los números resultaran así, pero eso no quiere decir que ahora no vayamos a trabajar todos a una. En los partidos de izquierda siempre hay discrepancias, porque aquí todo el mundo piensa y todo el mundo opina. Y eso hay que verlo como algo que puede sumar y no como algo que resta, de modo que esa discrepancia sirva para enriquecer y para fortalecernos. La diferencia sirve para enriquecer si se sabe gestionar bien.

Pero las heridas no han cicatrizado, siguen abiertas...

Acabamos de finalizar un proceso y puede haber algunas heridas abiertas, pero confiamos en que esas heridas, propias de organizaciones donde todo el mundo participa, cierren rápidamente, y pienso que va a ser antes de lo que se puede creer. Ése es el reto.

Usted lanzó una propuesta de ejecutiva integradora, ¿por qué no ha sido posible el consenso todavía?

Nos faltaba limar algunas cuestiones, fundamentalmente con la otra lista mayoritaria -la que encabezaba Rosa Albert-, pero creemos que en dos o tres semanas se solucionará. De cara al próximo Consell Polític Nacional ya tendremos una ejecutiva constituida con todos sus miembros (de momento se han elegido los doce representantes de la lista de Pérez Garijo y quedan vacantes los diez puestos reservados para la candidatura impulsada por el PCPV y uno para el sector de Glòria Marcos).

Se ha hablado de vetos, ¿han existido?

Para nada. En esta nueva etapa, si queremos volver a ser una herramienta útil para la sociedad en un año, pensamos que es fundamental para Esquerra Unida que busquemos los mejores perfiles para las competencias que correspondan. Se deben proponer nombres en función de las características. Si queremos que esto funcione, no se trata de poner nombres sino perfiles. Ésta ha sido una práctica que se ha utilizado durante muchos años en EUPV, que a veces no se ha optado por los mejores perfiles.

Respecto al proceso interno y la formación del Consell Polític, se ha denunciado la intervención de la dirección federal de Izquierda Unida y que ha habido un cambio en las reglas de juego. ¿Ha sido así?

Hasta que se inicia el proceso asambleario estábamos en una gestora de siete miembros con un equilibrio de cuatro a tres, y ahí ellos (el sector continuista) establecían las mayorías que nosotros acatábamos porque se estaba generando un buen clima que creíamos necesario para la asamblea, aunque eso no quería decir que estuviéramos de acuerdo con todas las cuestiones. ¿Qué pasó? Que se dio una situación inédita. Esa gestora tenía que haber finalizado su mandato en la asamblea con la elección de un nuevo coordinador, sin embargo se produjo un empate y no se eligió a la persona que debía dirigir EU. Ante la falta de acuerdo, la dirección de IU trasladó a la militancia que se debían cumplir los estatutos en los puntos en los que no había acuerdo. No intervino en nada más.

¿Cómo ha llegado Esquerra Unida a esta situación?

Se produce una situación que no se había producido nunca. En 2015 perdemos nuestra representación en las Corts. A raíz de esos resultados electorales se crea una situación que tal vez no hemos sabido gestionar, con visiones diferentes de cómo llevar adelante esta organización. Cuestiones propias de partidos que no son monolíticos.

¿Hasta qué punto es responsable de esta situación David Rodríguez?

Creo que el problema radica en que no se supo gestionar la diferencia. Se tenía que haber salido de la asamblea anterior sumando y tirando para adelante, y no se hizo. Además, EU ha estado muy invisibilizada en los últimos tiempos y cuando se nos ha visibilizado no ha sido para bien. Me hubiera gustado que hubiéramos sido más ágiles a la hora de fiscalizar al Gobierno.

Respecto al futuro de Esquerra Unida, ¿cuáles son los objetivos que se marca?

Yo quiero ser coordinadora de todos y de todas, quiero mirar hacia adelante. Por eso, a corto plazo el objetivo es conseguir una organización fuerte y cohesionada, y eso pasa por la integración de todas las sensibilidades. Ahora bien, también estamos trabajando para devolverle la fuerza a esta organización. Para ello debemos aprovechar las experiencias positivas que para nosotros han supuesto la gran cantidad de ayuntamientos en los que gobernamos.

EUPV no puede permitirse quedar fuera de nuevo de instituciones como las Corts Valencianes...

Más bien la sociedad valenciana no puede permitirse que Esquerra Unida esté fuera de las Corts. El papel que EU ha jugado en el País Valenciano en las últimas décadas, ha sido un referente de la izquierda, no lo puede desempeñar ninguna otra fuerza, ocupamos un espacio político que nadie ha podido ocupar. Nuestra sensibilidad, nuestras reivindicaciones, nuestras luchas... no las ocupan otras fuerzas políticas. Es verdad que han podido ocupar el espacio electoral, pero nunca el espacio político. Esquerra Unida ha sido siempre una herramienta útil y debe volver a serlo. Es imprescindible para la sociedad.

Se ha hablado de una posibilidad de recentralización en Izquierda Unida, ¿han corrido riesgo las federaciones?

Eso no se contempla en ningún caso, es algo que no entra dentro de la cultura de IU. Somos la organización que más claro lo tiene. Ni Izquierda Unida se va a disolver en ningún partido político ni se va a suprimir la autonomía organizativa que tienen las federaciones porque eso va en el propio ADN de la organización.

Por último y de cara a las próximas citas electorales de mayo de 2019, ¿cómo está el tema de las confluencias?

En nuestro ADN está confluir y nos encantaría reeditar 'A la valenciana', pese a lo que costó cerrar ese acuerdo, pero todo ello supeditado a un programa político. No obstante, eso se tendría que debatir y después sería la militancia la que dijera sí o no en un referéndum. Nosotros somos una organización muy democrática y por lo tanto estas cuestiones deben ser aprobadas por todos y por todas.

Etiquetas
stats