El nuevo gobierno de la Generalitat Valenciana esquivará el control parlamentario al menos durante dos meses. El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, confirma que que no tiene previsto comparecer en la Diputación Permanente de Las Corts Valencianes para dar cuenta de los cambios acometidos en su Ejecutivo tras la abrupta salida de Vox.
Mazón se sometió a la última sesión parlamentaria horas antes de que el líder de la ultraderecha anunciara la salida de los Ejecutivos autonómicos, entre ellos el valenciano. Esa misma noche, el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana publicó los ceses de Vicente Barrera y los otros dos consellers de Vox: Elisa Núñez y José Luis Aguirre. Al día siguiente, Mazón nombró tres nuevos consellers, aprovechando para acometer una reforma en el Ejecutivo y desgranó los nombramientos en una rueda de prensa, previa a la habitual de la portavoz del Consell cuando se convoca un pleno..
La oposición reclama que se convoque una sesión extraordinaria en las Corts para que comparezcan el president y los nuevos consellers, Miguel Barrachina en Agricultura, Vicente Martínez en Medio Ambiente y Salomé Pradas, que cambia a Justicia. El periodo ordinario de sesiones no comenzará hasta septiembre, lo que aleja las intervenciones de los nuevos responsables. Los partidos han registrado una propuesta para convocar una Diputación Permanente en la que el president explique la crisis de Gobierno y la actuación en las playas de Valencia, afectadas por un vertido.
El presidente de la Generalitat considera que ha “dado suficiente cuenta de todo ello a la opinión pública, a todos los representantes”. Preguntado por las peticiones de PSPV y Compromís, ha insistido este jueves: “No creo que el problema del presidente de la Generalitat en esta cuestión en general sea la falta de transparencia”. PP y Vox han manifestado que votarán en contra de la propuesta la semana próxima, cuando se debata, posponiendo a después del verano las preguntas de la oposición.
El Pleno del Consell se seguirá celebrando semanalmente hasta el 5 de agosto, cuando empezarán las vacaciones del Ejecutivo. El año pasado el primer pleno ordinario de la Cámara fue el 5 de octubre, con una sesión de control al Consell que inauguró el propio PP. Antes vinieron un par de sesiones con las comparecencias de los consellers y el pleno de la investidura de Mazón. Este año, no se espera que sea hasta mediados de septiembre cuando alcance la actividad y se programen las comparecencias de los consellers para explicar sus líneas de gobierno.