Entre los 400 invitados a la toma de posesión, en primera fila, los posibles candidatos a la alcaldía - Sánchez Zaplana, José Ciscar, Carlos Mazón, Carlos Castillo o Luis Barcala- y una ausencia, Sonia Castedo. El mensaje que se ha enviado esta mañana desde el Partido Popular de la Comunitat en la toma de posesión de Miguel Valor como alcalde de Alicante, ha sido contundente: con una nueva cara al frente de la alcaldía, se da carpetazo a la era Castedo: A partir de ahora, “hay que mirar el futuro”, ha afirmado el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, “hay un alcalde al servicio de la ciudad”.
Dieciocho votos del grupo municipal “popular” daban la alcaldía al concejal de Cultura, que juraba el cargo en valenciano ante la corporación en un pleno extraordinario. Además, ha tomado posesión la nueva concejal, de momento sin competencias, Carolina Concepción.
El presidente de la Generalitat ponía distancia con Sonia Castedo, y afirmaba, tras el acto oficial, que “hay personas en el partido que quieren trabajar por los ciudadanos, que tienen vocación de servicio” y que “van a estar, día a día, resolviendo los problemas de los alicantinos”. Alberto Fabra ha hecho hincapié en que con su presencia en Alicante, ha querido reconocer “a una persona” y “a un partido”, y apoyar el compromiso del nuevo equipo de Gobierno con la ciudad de Alicante. En definitiva, concluía Fabra, reforzar la “normalidad” de la gestión municipal.
Una gestión que va a ser realizada, de momento, por los hasta ahora concejales de Sonia Castedo, a los que, el ya alcalde de Alicante, Miguel Valor, se ha referido como “un sólido bloque”, “más unido que nunca”. A reglón seguido, el regidor ha calificado al equipo de Gobierno del PP de “compacto” y “disciplinado”, tras lo que añadido que “va a superar la gestión de estos meses venideros”.
Inversión y cambio de “talante”: se perfila la estrategia electoral
El equipo de Gobierno popular ha adelantado esta mañana lo que podría ser su estrategia en los cinco meses que quedan hasta las elecciones municipales: la inversión de cerca de15 millones de euros en nuevos proyectos emblemáticos para Alicante, algunos de ellos aparcados desde hace varios años, y la finalización de otros ya en marcha.
Proyectos como la entrada Sur de Alicante, por la que el presidente de la OAMI, Antonio Campinos, sacó los colores al President en público hace unos días; las obras de la Explanada: la finalización de la sala multiusos de la Fábrica de Tabaco; la consolidación y restauración del Castillo de Santa Bárbara o la ejecución del paseo marítimo de la Playa de San Juan, por citar alguno de ellos.
La autocrítica brilla por su ausencia
La oposición ha criticado que Miguel Valor no haya sido crítico y pusiera en valor la gestión de Sonia Castedo. Además, han pedido, en bloque, la retirada del Plan General de Ordenación Urbana por estar bajo sospecha judicial y formar parte de la “herencia envenenada” de los exalcaldes, Luis Díaz Alperi y Sonia Castedo.
La concejal socialista, Elena Martín, que ha participado en representación del PSPV “en aplicación de la legalidad”, ha exigido a Miguel Valor que “devuelva la ética” a la ciudad apartando a “concejales y funcionarios” imputados y “sospechosos de corrupción”. A Alberto Fabra, que “deje de castigar a Alicante con sus migajas inversoras” y priorice en las necesidades de los alicantinos.
Por su parte el candidato de Esquerra Unida, Miguel Ángel Pavón, que da por perdida la legislatura, ha acusado al Gobierno municipal del PP de provocar la “quiebra de las arcas municipales”. Además, en su intervención, ha realizado un recorrido por un equipo, dice, “estigmatizado” por los casos de presunta corrupción: Andrés Llorens por su imputación en el caso Magallanes; Marta García Romeu, por su presencia en la foto de en la fiesta de pijamas de Andorra; Juan Seva, que podría ser inhabilitado por su gestión del Lucentum o Sonia Alegría, que viajó en un Jet privado con Díaz Alperi y a la que se investiga, apunta el concejal, por “sí pudo formar parte de un delito de cohecho” en la pieza del Plan General del el caso Brugal.
Desde UPYD, Fernando Llopis, ha adelantado que no dejará de “luchar” con la presentación de “propuestas positivas” pero “inflexibles”, y desde Compromís per Alacant, Ignasi Bellido, habla de “decepción”. Afirma que Valor no se ha desligado como debía de un pasado de “corrupción y mala gestión económica” y destaca que, pese a que ha mejorado las formas “democráticas”, su discurso “es ajeno a la realidad de Alicante.