El frío empieza a hacer acto de presencia en València y los colectivos más vulnerables, como las personas sin hogar que se ven obligadas a dormir al raso, son los que más lo sufren.
Ante la bajada de temperaturas que se ha registrado y con el invierno a la vuelta de la esquina, el Ayuntamiento trabaja ya en un dispositivo especial para dar respuesta a las necesidades de estas personas que normalmente rechazan la posibilidad de dormir en albergues por las rigurosas condiciones que exigen a nivel de horarios, entre otras cuestiones.
El año pasado, durante la ola de frío polar que registró la ciudad a mediados de enero, el Consisorio salió del paso con la colaboración de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) habilitando la estación de metro de Turia como improvisado refugio.
Una opción que, según han explicado fuentes municipales, no está en los planes de la Concejalía de Servicios Sociales que dirige la edil Consol Castillo, al considerar que no es la solución más idónea.
Esto da a entender que se está buscando habilitar un recurso de baja exigencia con unas instalaciones más adecuadas en las que puedan alojarse las personas sin techo en caso de necesidad. Las mismas fuentes han comentado que en los próximos días se darán todos los detalles del dispositivo.
400 personas duermen al raso en Valencia
En la capital valenciana, al menos 404 personas viven de forma permanente en las calles de la ciudad, la mayoría de ellas viven en condiciones de alta o muy alta vulnerabilidad, según datos de RAIS Fundación, entidad sin ánimo de lucro que  lucha contra la exclusión social, especialmente de las personas sin hogar, y que colabora con el Ayuntamiento de València.
Según los datos que maneja RAIS Fundación en virtud de una encuesta realizada el pasada mes de abril en el marco del programa Homeless Meet Up Valencia, el 45% de las personas encuestadas (269) han sido atacadas o agredidas y que el 57% padecen graves problemas de salud.
Esta es una de las causas por las que, si la media de esperanza de vida en España es de 80 años, para las personas sin hogar la media es de 52.
Las personas sin hogar en la ciudad de Valencia también son vulnerables porque el 77% de ellas no tienen ningún tipo de ingreso ni prestación pública y el 29% no puede cubrir sus necesidades básicas.