Ford aplaza la electrificación en Almussafes en pleno despido de 1.100 empleados y tras obtener 8,5 millones de la Generalitat

Ford está estudiando dar un “cambio de paso” y “aplazar cualquier decisión que tenga que ver con inversiones” para la electrificación de la fábrica de la multinacional en Almussafes (Valencia).

Así lo ha explicado el sindicato mayoritario en la factoría, UGT, en un comunicado tras la visita que han realizado a Almussafes el director de Operaciones de Ford Motor Company, Kumar Galhotra, y su equipo de Estados Unidos este jueves y viernes. La visita se ha producido en medio de la incertidumbre sobre la llegada de las inversiones para que Almussafes fabrique la nueva generación de vehículos eléctricos de la firma en Europa.

UGT ha advertido que “este nuevo posicionamiento por parte de la compañía supone una alteración de lo inicialmente establecido y acordado” y sitúa a la plantilla tanto de Valencia como del conjunto de Ford Europa “en el alambre”. “Esperamos concreción en un tiempo breve por parte de la dirección mundial de Ford ante este cambio de paso”, ha señalado.

Mientras Ford, en Detroit, “revalúa” las posibilidades de electrificación para Almussafes, el sindicato ha reclamado que la empresa “debe garantizar carga de trabajo suficiente para mantener la plantilla, inicialmente prevista en los planes por la electrificación”. En ese sentido, ha planteado que se potencie la fabricación de vehículos híbridos.

UGT ha subrayado que su posición negociadora permanecerá “inalterable” mientras “no quede despejada esa incógnita”, “quede comprometida esa carga de trabajo”, que cifra en alrededor de 200.000 coches al año“, y se permita ”la transición a la electrificación sin más sobresaltos“.

Además, ha indicado que la compañía “tendrá que garantizar una fecha de revisión del Plan de Electrificación durante ese proceso de transición que ahora se alarga”. “En caso contrario, la empresa no podrá pretender negociar más medidas de flexibilidad, al menos con la UGT”, ha insistido.

En este marco, UGT y la dirección se han emplazado a volver a reunirse en diciembre. El sindicato ha remarcado que “la pelota está en el campo de la empresa y, a pesar de la complejidad del momento, debe haber claridad y determinación por su parte”.

De ser así, UGT ha asegurado que estará dispuesto a “ofrecer soluciones”, “si es que realmente Ford quiere continuar con esa apuesta de futuro y no continuar durante más tiempo instalados la indecisión”.

“El futuro de Ford Europa está en cuestión, y así se pondrá en evidencia esta próxima semana desde Colonia (Alemania), a través de las primeras movilizaciones que se van a llevar a cabo” en esta ciudad, ha explicado el sindicato, que insta a la firma del óvalo a dar “respuestas” porque en Valencia la compañía “tiene un acuerdo” con UGT que cumplir.

Este cambio de rumbo en los planes de Ford se producen en pleno proceso de despido de 1.144 empleados, un expediente de regulación de empleo (ERE) aprobado con los votos a favor de UGT y en contra de Intersindical, precisamente con la excusa de la menor mano de obra necesaria para la fabricación de vehículos eléctricos que ahora se retrasa sin un plazo concreto.

El ERE se firmó el pasado mes de abril y desde entonces hasta el mes de julio se habían apuntado de forma voluntaria unos 650 empleados, es decir, un 60% del total. Aproximadamente la mitad de ellos lo hicieron a través de las bajas incentivadas y la otra mitad se acogió a las prejubilaciones. La fecha límite para cubrir el 100% de los despidos, que afectan al 18% de la plantilla, es el 31 de diciembre.

Las principales causas de este recorte son la menor carga de trabajo prevista al haber cesado la fabricación en abril de los modelos S-Max y Galaxy. De esta forma, la factoría valenciana tan solo fabrica el Kuga y el Transit, este último modelo también con fecha de caducidad a lo largo de 2024, por lo que tan solo se producirá en las instalaciones valencianas el Kuga hasta que empiecen a fabricarse los modelos eléctricos que ahora se retrasan, de ahí que desde UGT se exija que se adjudiquen modelos híbridos a la planta valenciana para garantizar la carga de trabajo.

Por otra parte, el Gobierno valenciano ha incluido sendas inyecciones económicas en sus presupuestos para el año 2024 en favor de las multinacionales automovilísticas Ford y Volkswagen, cuyos proyectos de futuro son de enorme trascendencia para el futuro económico de la Comunitat Valenciana.

En el caso de Ford, figura una partida de 1,5 para la Fundación para el Desarrollo y la Innovación coparticipada entre Ford España S. L. y la Generalitat Valenciana y otros 7 en ayudas. En total, son 8,5 millones de euros, 2,5 millones menos de los aportados para el presente ejercicio.

Desde el año 2012, la Generalitat Valenciana ha inyectado a la multinacional un total de 181,1 millones de euros, incluyendo los 8,5 previstos para el año que viene. El año 2019 fue con diferencia el récord en cuanto a la cuantía aportada por la administración autonómica, con un total de 27,3 millones de euros.

Por otra parte, las cuentas autonómicas también reflejan una primera partida de 3 millones de euros para PowerCo, filial de Volkswagen encargada de desarrollar la gigafactoría de Sagunt.