Mazón reclama más agua para l'Albufera y el ministerio justifica el envío de 50 hectómetros cúbicos, 30 más de lo previsto

El 15 de mayo finalizó el periodo que marcan las disposiciones normativas del Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Júcar del Real recogido en el Decreto 35/2023, en lo relativo al aporte a la Albufera de València de 10 hectómetros cúbicos (hm3) al año del sistema del Júcar y otros 10 hm3 del sistema Turia. Unos aportes acordados en su día por la Generalitat Valenciana y el Gobierno.

Vencido el plazo, el presidente del Gobierno valenciano, Carlos Mazón, ha denunciado que tan solo han llegado dos hectómetros procedentes del sistema del Turia a través de la acequia de Favara, tal y como trasladó en un escrito el día que finalizaba el plazo el director general de Medio Natural de la Generalitat, Raúl Mérida, a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ).

Mazón ha recalcado este viernes que el plazo “viene marcado en la propia normativa”, por lo que ha sostenido que “hay un incumplimiento de la normativa, hay una desidia, hay mentira y hay abandono de l'Albufera”. “Esto es muy grave lo que está ocurriendo y muy grave lo que ya ha ocurrido. Ahora resulta que vamos a tener que esperarnos a que pase el verano, a que empiece otra vez el ciclo hidrológico, para poder volver a iniciar las aportaciones de agua a l'Albufera”, ha censurado.

Sin embargo, se ha encontrado con una respuesta contundente de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, quien a través de su red social X ha desmentido a Mazón: “Rechazo el populismo hídrico. El agua es importante para personas, tejido económico y ecosistemas. Estimado presidente Carlos Mazón, creo que le han dado mal el dato. Los aportes a l'Albufera duplican los previstos en el plan hidrológico. Un saludo”.

Consultadas fuentes de la CHJ por elDiario.es, han asegurado que como se encargó de explicar el Secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, desde que empezará el año hidrológico en octubre del pasado año hasta la actualidad se han enviado hacia l’Albufera “más de 50 hectómetros cúbicos, una cifra muy por encima de los volúmenes ambientales que figuran en las concesiones de las comunidades de regantes”

Así, aseguran que del sistema Turia se han aportado 14 hm3 de excedentes invernales del Turia y aguas regeneradas a través de la acequia de Favara, a los que se unen otros 3,5 hm3 como aporte extraordinario por sequía desde la depuradora de Pinedo.

Además, detallan que desde el sistema Júcar se han transferido 25 hm3 de aguas fluyentes del Júcar a través de la Comunidad de Regantes de Sueca, otros 2 hm3 de aguas del Júcar y aguas regeneradas a través de la Comunidad de Regantes de Sueca y 6 hm3 más de aguas del Júcar y aguas regeneradas a través de la Acequia Real de Júcar.

“Como se puede observar, los volúmenes superan con creces los 10 más 10 hm3 que establece el Plan Hidrológico. La polémica está, entendemos, en lo que consideran los técnicos del Parque sobre cómo debe llegar el agua hasta l’Albufera. Desde el Parque quieren el agua a demanda, es decir, regulada, pero eso dista mucho de lo dice el Plan Hidrológico”, explican.

Además, “para realizar aportes directos a demanda ni siquiera tienen conducciones desde los ríos hasta el lago, así que el agua se tiene que mandar, en todo caso, a través de las comunidades de regantes”. Las mismas fuentes apuntan a que lo que sí que permite el Plan es que se podría llegar a conseguir “una asignación de agua regulada, pero para llegar a esto la Generalitat tendrá que llegar a un acuerdo con los regantes, como les hemos dicho ya en repetidas ocasiones”.

Por otra parte, han añadido que “la CHJ sigue predispuesta a avanzar en el protocolo de emergencia que permitiría realizar aportaciones extraordinarias, siempre que se dieran las condiciones que previamente hay que consensuar”.

Pese a estas explicaciones, Mazón ha insistido en que es mentira que se hayan producido estos aportes y ha asegurado que se trata de concesiones de Sueca y de Cullera que llegan al Parque Natural pero no al lago, como se había acordado.

El presidente de la CHJ, Miguel Polo, ha explicado que “cuando la Generalitat Valenciana ha pedido agua para la Albufera, se le han pedido determinadas justificaciones y una de ellas ha sido que nos dijeran por dónde había que enviar el agua y tengo que decir que nunca hemos tenido respuesta a esa petición porque la Generalitat no tiene ninguna conducción que conecte el río Júcar y el río Turia con con el lago”. Por lo tanto, según Polo, “cuando la CHJ envía agua lo hace a través de las acequias de los regantes”. Dicho esto, ha insistido en que la CHJ ha puesto a disposición del lago “más de 50 hm3 de agua que en todo caso tiene que ser el Parque Natural el que se encargue de garantizar que las aguas llegan al lago o a donde consideren que deben de llegar”.

Desde la Generalitat sin embargo lo niegan y aseguran que es la CHJ la que lo regula como administración hidráulica la que tiene que garantizar que un ecosistema reciba el agua de caudal ecológico que indica el Plan.

Consultada la organización ecologista Xúquer Viu sobre la polémica como integrante de la junta rectora del Parque Natural de la Albufera, ha asegurado que no le costa que se hayan realizado a la Albufera las aportaciones ambientales de 10 hm3 provenientes del Xúquer i de 10 hm3 del Túria, es decir, que los 50 hm3 que alegan el ministerio y la CHJ no serían los que se contemplan como aportaciones ambientales en el plan.

“Las organizaciones ambientales ya advertimos repetidamente a las alegaciones presentadas al Plan Hidrológico, que entró en vigor el enero de 2023, que los caudales ambientales de la Albufera no eran suficientes y, sobre todo, que no estaban garantizados los requerimientos hídricos fijados en 210 hm3. Solo los 14’5 hm3, procedentes de la modernización de la Acequia Real, eran reales, un 7% del total que se ha estimado necesario por la buena salud de la Albufera”, han explicado.

Para las organizaciones ambientales, además de Xúquer Viu, SEO y Agró, la solución pasa por realizar aportaciones directas de agua del Júcar desde Tous, sin estar condicionada a la modernización de regadíos: “Esta aportación, que ya se ha hecho en el pasado, por distintos conductos, como la Acequia Real o los barrancos de Picassent y el Poyo, ahora es más urgente que nunca. En una situación, como el actual, con las reservas hídricas próximas al 50% es perfectamente posible hacer un desembalse para asegurar el caudal ecológico de la Albufera”.

Por último, han recordado que “es necesario que los requerimientos hídricos ambientales que necesita la Albufera se incluyan en el plan de gestión que tendría que tener este espacio, para pertenecer en la Red Natura 2000, un documento obligatorio desde hace años y del cual todavía carencia, incumpliendo la normativa europea, el mismo modo que tendrían que incorporarse a las normas de gestión del parque natural, y así, garantizar la coordinación de las administraciones implicadas a asegurar el buen estado de conservación de este humedal”.