El Valencia CF ha presentado este jueves el cuarto proyecto del nuevo estadio en un acto celebrado en las instalaciones de la Avenida de las Cortes Valencianas, cuyas obras permanecen paralizadas desde hace 13 años.
El Director General, Sean Bai, el Director de Operaciones, Christian Schneider, la Directora Financiera, Inmaculada Ibáñez, y el arquitecto responsable del proyecto, Mark Fenwick, han detallado las claves de un proyecto “ilusionante para el Club, su afición y la ciudad”, según han afirmado.
El acto también contó con la asistencia de Joey Lim, Director Ejecutivo y Consejero del Valencia CF, Teo Swee Wei, director general de la Fundació VCF, y los embajadores sociales del Club Miguel Ángel Bossio y Miguel Tendillo.
Según han informado, “el nuevo estadio del Valencia CF será un referente en sostenibilidad gracias a su cubierta solar fotovoltaica, contará con balconadas mediterráneas inspiradas en el actual Mestalla y tendrá una capacidad de 70.000 espectadores”, aunque en el momento de su inaguración la capacidad será de 49.000.
En este sentido, tanto Fenwick como Schneider han explicado que la asistencia media a Mestalla en los últimos 10 años ha sido de 35.000 espectadores y que por lo tanto en estos momentos no se considera necesario un mayor aforo operativo, aunque han destacado que la capacidad se puede adaptar a las circunstancias hasta el tope de 70.000 espectadores. Esto permitiría al recinto acoger todo tipo de eventos y finales de competicionales internacionales.
Además, “el recinto ofrecerá una importante mejora experiencial (visión óptima y comodidad) y una gran zona de restauración y ocio ubicada en el segundo anillo”.
Sobre la pista de atletismo, incluida como requisito en el convenio de 2005, Fenwick ha comentado que “justo en el nivel de altura en el que estamos se puede montar una gran plataforma de atletismo por dimensiones del 'bowl', cabe”, si bien es cierto que desde el Ayuntamiwnto aseguran que la propuesta técnica no está desarrollada.
En cuanto al aparcamiento, se mantienen las entre 400 y 500 plazas de parking previstas en la ATE, puesto que el plan redujo esta previsión con respecto al convenio de 2005: “En el Mundial no se planifican parkings bajo los estadios. El Madrid tiene 490 en su reforma del estadio. El estadio es más sostenible y viable con trasporte público”, ha explicado Fenwick.
En cuanto al aspecto económico, Ibáñez remarcó la importancia de mantener la Actuación Territorial Estratégica (ATE) para hacer posible la financiación, ya que gran parte de ella está vinculada al convenio por el cual se otorgaron al club importantes ventajas urbanísticas en forma de edificabilidad para que pudiera obtener los recursos necesarios para finalizar el nuevo estadio.
Como avanzó elDiario.es, la directora financiera ha explicado que la venta del edificio de oficinas, del suelo terciario, del viejo mestalla o la línea de crédito de 15 millones de Caixabank depende de que el convenio urbanístico siga vigente. Por su parte, Sean Bai ha asegurado que no es su intención judicializar esta cuestión con las adminsitraciones, con las que quiere ir de la mano, pero adviertió de que si finalmente se caduca la ATE no tendrá más remedio que defender los intereses del club y recurrir la decisión en los juzgados.
Sobre el desfase presupuestario que podría darse por el aumento de los costes de los materiales, Schneider comentó que es algo que tienen en cuenta pero que irán viendo en su momento cuando se desarrolle el proyecto constructivo, ya que el precio de los materiales varía casi a diario.
En cuanto a los plazos, han asegurado que el club cuanta con liquidez del fondo CVC para construir el polideportivo de Benicalap y para iniciar las obras del nuevo estadio nada más se tramiten las licencias y a partir de ese momento, el plazo para finalizar el coliseo sería de unos dos años.
Ibáñez ha afirmado que el estadio “se va a construir sí o sí, con o sin ATE puesto que no tendría sentido hipotecarme a 50 años con CVC y disponer de 80 millones para no hacerlo”. En caso de cayera la ATE, “habría que pedir una nueva licencia en base a los nuevos parámetros y metros, pero el estadio se haría, aunque tardaríamos más”.
Todos estos detalles están siendo analizados por la concejalía de Espacio Público que dirige Lucía Beamud, competente en materia de licencias de actividades, única delegación que dispone del proyecto modificado en estos momentos.
El Valencia CF presentó recientemente un escrito de alegaciones a la Conselleria de Política Territorial en respuesta al expediente de resolución anticipada y declaración de caducidad del Plan de Actuación Territorial Estratégica (ATE) iniciado el pasado mes de noviembre por aprobación del pleno del Consell. En aquel momento, se dio un plazo de 90 días al club para que presentara un proyecto creíble y con financiación garantizada para que el club pudiera mantener los benificios de la ATE.
La administración deberá ahora analizar el escrito y dar una respuesta oficial sobre el mismo, con el que se daría por finalizado el expediente, cuya resolución se debería llevar al pleno del Consell, posiblemente a lo largo del mes de julio.
Gómez insiste: “La ATE va a caducarse”
Sobre la presentación del proyecto, la vicealcaldesa de València y concejala de Desarrollo Urbano, Sandre Gómez, ha comentado que “la ATE va a caducarse” y que “ya hay un incumplimiento y es lo que legalmente hay que hacer como acredita la abogacía de la Generalitat; no se va a ganar tiempo con nuevas imágenes o vídeos”.
Según Gómez, “sin ATE las condiciones urbanísticas y sus beneficios sólo podrán mantenerse si cumplen los compromisos del estadio” y en este sentido “a falta de estudiar la documentación y por lo que conocemos lo que han presentado es en lo esencial lo mismo que ya presentaron y por lo que tanto urbanismo, como el IVF emitimos informes en contra, por lo que no cumpliría con sus obligaciones”.
La vicealcaldesa socialista ha recordado que “lo que planteamos es que una vez caducada la ATE se suspendan la posibilidad de obtener licencia sobre los beneficios urbanísticos y sólo puedan desbloquearse previo cumplimiento”, es decir, “no va a poderse obtener los beneficios sin cumplir, porque no vamos a arriesgarnos a que se utilicen en algo que no sea el estadio o se extraigan del club”.
Gómez ha afimado que “la ciudad ayudará al Valencia, pero solo a una propiedad del Valencia que cumpla” y en ese sentido se va a garantizar que “ni un euro de los derechos urbanísticos se destine en el futuro a algo que no sea el estadio para el club y la ciudad”.