Ocho restaurantes con 'calçotadas' por las que merece la pena viajar a Catalunya

Calçots.

Elisabeth G. Iborra

4 de marzo de 2022 22:39 h

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Si en un artículo anterior sobre calçotadas te explicábamos cómo comer calçots y dónde probarlos por España, en este nos vamos a concentrar en las masías y restaurantes dentro de Catalunya donde te puedes escapar a probarlos en su ambiente más auténtico.

Es decir, en medio del campo, disfrutando del olor, las brasas, el aire libre y todo el buen rollo que se genera en el grupo con los guantes, los baberos, los porrones de vino y las caras tiznadas. Porque no hay nada más triste que una calçotada a solas encerrados entre cuatro paredes.

La meca de los calçots es Valls, en Tarragona, y en torno a su radio de recolección de esta especie de cebollas alargadas con Indicación Geográfica Protegida, se han ido extendiendo distintas masías en las que se celebra la temporada desde noviembre hasta abril, así que aún te quedan dos meses.

En Barcelona, ya son habituales

Can Cortada

En el parque natural de Collserola, con unas vistas tremendas de la Ciudad Condal, no deja de ser una masía catalana de primera, no en vano es Patrimonio Artístico de Barcelona, y en sus amplios salones y espacios hay mesas para grupos de todos los tamaños.

El menú calçotada consta de:

  • Calçots con salsa tradicional.
  • Parrillada: cordero, chistorra, butifarra negra y butifarra de la Garriga.
  • Alubias y patata al caliu.
  • Crema catalana.
  • Pan, agua y vino.
  • Café o infusión (y botella de orujo vía libre para la sobremesa).
  • Precio: 40 euros (IVA incluido).

Can Sala

Es mucho más que una masía, pues en todo su entorno al aire libre los críos pueden explayarse jugando, viendo animalitos en la granja e incluso dando un paseo en pony. Tienen monitores para que los adultos puedan gozar del menú y sus bebidas:

  • Entrante.
  • Calçots con su salsa romesco.
  • Parrillada de carne: butifarra de Montornès, pollo a la brasa, panceta y churrasco. 
  • Verdura a la brasa como opción vegana.: alcachofa, pimiento o berenjena (según producto de proximidad), patata caliu más all i oli.
  • Crema catalana o flan casero o pastel (Massini o Selva negra).
  • Vino y agua.
  • Precio: 35 euros (entrada e IVA incluidos).

Can Lloses

En Sant Pere de Ribers, es uno de los restaurantes de referencia en el sur de Barcelona para comer el clásico menú de calçots, alcachofas a la brasa, vino del Penedés, cava y carne a la brasa con judías secas y all i oli.

En Tarragona, por Valls

Restaurant Casa Fèlix

Es uno de los pioneros de Valls que sacó las calçotadas del ámbito privado al público. 

Menú calçotada:

  • Calçots con salsa tradicional.
  • Longaniza a la brasa con judías.
  • Carne de cordero a la brasa con alioli y guarnición.
  • Crema catalana.
  • Vino del Alt Camp, cava y café.
  • Precio: 38,50 euros (IVA incluido).

Cal Ganxo

En Masmolets (Valls), también fue de los primeros y lo que más gusta es su rusticidad, comerte el menú entre paredes de piedra, como las familias antaño.

Menú calçotada:

  • Calçots con salsa tradicional.
  • Parrillada: cordero, longaniza y butifarra negra.
  • Acompañamiento de judías de ‘ganxet’ y alcachofas.
  • Postres: crema catalana con carquiñolis y naranja con vino dulce.
  • Pan, vino y cava Brut Nature.
  • Precio: 41 euros (IVA incl.).

Restaurante El Vinyet

En Vila-rodona, es un rincón exquisito de un antiguo pajar de los alrededores de 1900, rehabilitado primero como bodega, más tarde como masía y finalmente como restaurante para 48 comensales, ideal para grupos pequeños. Se sitúa junto al río Gaià y muy cerca de Santes Creus y en medio de la ruta del Cister. Se puede elegir también los segundos a la carta en lugar de las grandes bandejas de carnes.

Menú Calçotada:

  • Calçots con salsa tradicional.
  • Parrillada: cordero, longaniza y butifarra negra.
  • Acompañado de judías del ‘ganxet’, alcachofa y patata.
  • Postres: crema catalana y una naranja.
  • Vino, cava y café.
  • Precio: 45 euros.

En Girona y Lleida también hacen

El Trull d'En Francesc

En Boadella d'Empordà, en el Alt Empordà, Girona, era un antiguo molino de aceite del siglo XVII del que se conservaron las paredes de piedra de la almazara original, el zócalo y la muela para moler las aceitunas del siglo XIX.

También se restauró la prensa de 1870, que se encuentra en el comedor principal. Delante del restaurante se acondicionó una terraza que forma un mirador sobre la Muga y la esclusa del Cordón, así que es un marco idílico para disfrutar del exterior y comer bien en el mismo borde de Francia.

Menú de la Calçotada: 

  • Entrantes.
  • Escudella de galets con la pelota del caldo.
  • Xató, ensalada de escarola con anchoa, atún, bacalao y salsa romesco. 
  • Primer plato: calçots a la brasa con su salsa.
  • Segundo plato: cordero y butifarra a la brasa con alcachofas y judías secas.
  • Crema catalana cremada.
  • 30 euros (IVA incluido).

Restaurant Urgell

En Lleida capital, tiene muy buena fama por sus menús, especialmente por el de la calçotada. 

  • Primer plato: calçots.
  • Segundo a elegir entre cordero, churrasco, blanco y negro, pies de cerdo, conejo a la parrilla, costilla de cerdo confitada y asada con patata al rescoldo o entrecot de ternera con adorno de verduras a la brasa (suplemento de ocho euros).
  • Agua.
  • Otras bebidas aparte.
  • Postre y café.
  • Precio: 25 euros.
  • Pasteles de celebración: suplemento de 2,50 euros por persona.

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