Las mejores grabadoras de voz para utilizar en nuestro día a día
Antaño, una grabadora de voz era un dispositivo realmente necesario si queríamos evitar llevar una libreta encima o, simplemente, queríamos recordar cosas o, por nuestro trabajo, tuviéramos que guardar algunos fragmentos de entrevistas o apuntes.
Es cierto que, desde que los móviles disponen de grabadoras propias, este tipo de dispositivos están en desuso, pero solo en algunos ámbitos. Las grabadoras de voz, a pesar del auge de las apps de grabación, ofrecen una calidad mucho mayor de audio y son tan portátiles como cualquier smartphone. ¿En qué casos pueden resultar útiles?
Para algunos perfiles, pueden llegar a ser dispositivos de uso casi diario. Algunas ejemplos: personas que escriban (de manera profesional o amateur) pueden ver en este artilugio un buen método para guardar entrevistas, pensamientos rápidos, etc.; doctores o médicos que necesiten disponer de una; o, simplemente, personas con muy mala memoria que puedan aprovechar las grabadoras como una especie de diario para, más tarde, recordar lo que han hecho.
En ConsumoClaro, te recomendamos algunas grabadoras de voz que pueden ser útiles.
Mini grabadora de Voz de Telefo
Puede que muchos piensen que uno de estos dispositivos es más una molestia que otra cosa. Esta grabadora de voz de Telefo es sorprendentemente pequeña, aunque su calidad de audio es peor que la de otros modelos.
Pesa 140 gramos y su lado largo es de 5,4 centímetros, es decir, cabe prácticamente en cualquier parte. Cuenta con una memoria de 64 GB y es compatible con MP3, WAV y WMV.
Una mejor opción es la grabadora de Tschisen, sin la necesidad de tener un modelo grande. Es compatible con la mayoría de formatos y una gran calidad de sonido. Cuenta con un botón de “stop” para parar y, más tarde, reanudar la grabación. Además, este dispositivo dispone de protección antirrobos a través de una contraseña y 8GB de memoria.
Grabadora de voz PHILIPS DVT1150
Otra alternativa con muy buena calidad de audio y asequible: la Philips DVT1150, un clásico de estos dispositivos. Se trata de una grabadora con una autonomía de hasta 44 horas y 4GB de memoria, lo que nos asegura que podamos utilizarlo durante al menos una o dos semanas (dependiendo del uso que le demos).
Este grabadora es, según su fabricante, plug&play, es decir, que podemos conectarla directamente al ordenador y reproducir los audios sin necesidad de programas.
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