El cine de 2023 mirará de frente a la taquilla. Tras un año en el que la venta de entradas se ha recuperado pero lejos de las cifras de 2019, las salas se enfrentan al reto de volver a algo parecido a la normalidad. Lo harán con un buen puñado de grandes producciones de Hollywood, que seguirá recurriendo a la nostalgia y las franquicias, y a unos cuantos nombres conocidos de la industria.
En el cine español la lucha será no palidecer frente a la etiqueta de ‘el gran año del cine español’ que se colocó a 2022. La calidad de las películas españolas ha sido tan alta que el reto será mantenerlo y seguir convenciendo a los espectadores para acudir a ver historias propias, lejos de fórmulas y grandes estudios. Esto es lo que nos espera en 2023.
Cine español
Los popes
En 2023 se producirá un acontecimiento histórico, el regreso de Víctor Erice tras 30 años sin dirigir un largometraje. Cerrar los ojos es el nombre de su obra, que contará la historia de la amistad entre un director de cine y un actor desaparecido desde hace años. Es el filme más esperado del año en el cine español y habrá que ver si consigue estar presente en los festivales más prestigiosos. Cannes, donde Erice presentó sus dos últimas películas, sería el lugar idóneo.
Precisamente será en el certamen francés donde otro de los popes del cine español, Pedro Almodóvar, estrene su cortometraje Extraña forma de vida. Un wéstern queer que ha sido definido como su respuesta a Brokeback Mountain —proyecto que le rondó hace décadas— y que tiene a Ethan Hawke y Pedro Pascal como protagonistas.
Entre los veteranos que estrenarán película este año, también está Jaime Chávarri, con La manzana de oro y Fernando Trueba, que tiene dos filmes. Su vuelta a la animación, técnica que ya probó con Chico y Rita y que le vuelve a unir a Mariscal. El nuevo proyecto se llama They shot the piano player. También estrenará Haunted heart, que ha rodado con Matt Dillon y Aida Folch.
Las mujeres siguen al frente
Como ha pasado en 2022, en este nuevo año muchos de los proyectos más interesantes los traen las directoras. Casi todas se encuentran sin fecha, esperando el mejor momento de estreno teniendo en cuenta su posible presencia en festivales. Destaca el regreso de Paula Ortiz, que adapta un texto de Juan Mayorga en Teresa, película sobre la santa que en 2022 estuvo en boca de todos por la censura a Paco Bezerra. Será su primera película en España desde La novia.
También regresa a su cine más personal Arantxa Echevarría que, tras sorprender a todos con Carmen y Lola —Goya a la Mejor dirección novel y presencia en Cannes incluida—, probó suerte en el cine comercial y ahora retoma su ansiado proyecto Chinas, sobre dos niñas chinas de segunda generación pero en situaciones muy diferentes.
También estrenarán su segunda película Elena Martín Gimeno (Creatura), Celia Rico (Los pequeños amores) o Carlota Pereda que, tras el fenómeno de Cerdita, sigue abonada al terror con La ermita, que protagoniza Belén Rueda y que acaba de terminar su rodaje. Elena Trapé presentará Els encantats, y habrá que estar atentos a dos debuts que prometen mucho: el de Estíbaliz Urresola, que ha rodado su primer largo de ficción justo después de triunfar con su corto Cuerdas (nominado al Goya). Una historia sobre una niña trans que se llama 20.000 especies de abejas. Por su parte, Itsaso Arana se pasa al otro lado de la cámara y ha juntado un reparto donde destacan Bárbara Lennie e Irene Escolar en Las chicas están bien.
Desde comienzo de año, las películas españolas estarán en los festivales de cine. Sica, de Carla Subirana, estará en Berlín en la sección Generation 14plus y la venezolana Patricia Ortega estrenará en Sundance Mamacruz, una producción española con Kiti Mánver como protagonista.
Los (presumibles) éxitos
El cine español también buscará éxitos de taquilla y público. Hay muchas expectativas por ver cómo estrena Netflix su gran apuesta de este año: La sociedad de la nieve, el esperadísimo nuevo filme de Juan Antonio Bayona que cuenta la historia de los supervivientes del accidente de avión que se contó en Viven. Un tema que le obsesiona desde hace años y para el que ha estado documentándose mucho tiempo. Una película ambiciosa que ha producido la plataforma, como también ha hecho con Hermana Muerte, el spin-off de Verónica que ha dirigido también Paco Plaza y que recupera uno de los personajes más emblemáticos para contar una historia en un convento en la posguerra española.
Las salas esperarán con ganas la llegada de CampeoneX, secuela del filme de Javier Fesser que ganó el Goya a la Mejor película con esta comedia que arrasó en taquilla convirtiéndose en un inesperado fenómeno de masas que espera repetir ahora ese éxito. También debería funcionar en los cines Mi soledad tiene alas, debut en la dirección de Mario Casas que ha producido con Warner y que ha terminado su rodaje antes de navidad. Una historia sobre su propia vida en el barrio y que protagoniza su hermano, Óscar Casas.
El cine de autor
El tridente del cine de autor español, Lois Patiño, Albert Serra y Oliver Laxe, podría coincidir estrenando en 2023. Quien lo hará seguro será el primero, que tiene Samsara en postproducción. Serra podría presentar este año su documental sobre la tauromaquia, y Laxe prepara proyecto producido por El Deseo, la productora de los hermanos Almodóvar, pero no ha empezado a rodar y lo más lógico sería que llegara en 2024.
Otros habituales de los festivales de cine que estrena en 2023 son Manuel Martín Cuenca, que acaba de terminar de rodar en Cádiz El amor de Andrea; El salto, drama sobre la inmigración de Benito Zambrano; Pablo Berger con su primera película de animación, Robot Dreams; y Antonio Méndez Esparza, que adapta a Millás en Que nadie duerma, con guion de Clara Roquet. Prometen también La desconocida, adaptación de Pablo Maqueda de una obra de Paco Bezerra; La casa, traslación a acción real del cómic de Paco Roca que ha rodado Alex Montoya y Golem, de los inclasificables Burning Percebes.
Hollywood y Europa
Marvel vs DC
Como siempre, Marvel llenará salas con las nuevas aventuras de sus héroes. La primera en llegar será la nueva entrega de Ant-Man, que lo hará el próximo 17 de febrero y presentará al gran villano de esta nueva fase: el Kang que interpreta Jonathan Majors. En 2023 regresarán con su última aventura juntos los Guardianes de la Galaxia (5 de mayo); y The Marvels, secuela de Capitana Marvel que llegará el 28 de julio.
Fuera de su universo cinematográfico y de la mano de Sony y no de Disney, llegarán la animada Spider-Man: Cruzando el multiverso el 2 de junio y Kraven the Hunter (6 de octubre), con la que el estudio quiere seguir explotando los villanos del hombre araña como hizo con Venom.
Será interesante ver cómo funcionan y qué ocurre este año con las películas de DC. El fichaje de James Gunn ya se sabe que llevará consigo una reestructuración de los planes cinematográficos que había, y eso conllevará el final de la presencia de Gal Gadot como Wonder Woman y de Henry Cavill como Superman. Gunn anunciará en breve los primeros títulos, pero de momento tendrá que ver el estreno de cuatro películas de la anterior hornada: Shazam, la furia de los dioses (17 de marzo); The Flash (16 de junio); Blue Beetle (18 de agosto) y Aquaman and the Lost Kingdom (22 de diciembre).
Franquicias y nostalgia
Para intentar revitalizar la taquilla (que con Avatar 2 parece que ha recobrado la salud de 2019), Hollywood recurrirá, como en los últimos años, a la nostalgia y las franquicias. Veremos nuevas entregas de Fast and Furious, que estrenará su décima parte el 19 de mayo. Misión Imposible llegará con su séptima parte, que intentará aprovecharse de la nueva popularidad de Tom Cruise tras Top Gun: Maverick, el 14 de julio. Habrá nuevas películas de Tranformers, John Wick y, la más esperada, Indiana Jones y el dial del destino, que verá la luz el 30 de junio. Lo hará con cambio en la dirección, Steven Spielberg cede el testigo a James Mangold.
Dune 2 llegará en noviembre, y veremos secuela tardía de El exorcista con el regreso de Ellen Burstyn en octubre dirigida por David Gordon Green, que ya revitalizó otra franquicia como Halloween. Habrá película animada de Mario Bros, una de acción real de Dragones y Mazmorras y secuela de Posesión Infernal aprobada por Sam Raimi. Su primer tráiler promete sangre y vísceras a partir del 21 de abril.
El duelo más gracioso (y viral) del cine se vivirá el 21 de julio, cuando se enfrenten en taquilla dos de las películas más esperadas del año y dos de las pocas que son historias originales y no secuelas. Barbie bajo la mirada de Greta Gerwig, y con guion de ella junto a Noah Baumbach, se las verá en las salas con Oppenheimer, película sobre el creador de la bomba atómica dirigida por Christopher Nolan.
Los autores y los festivales
Aunque la taquilla parezca rendida a las franquicias y a los superhéroes, todavía hay hueco para los autores en Estados Unidos. Muchos han tenido que refugiarse en las plataformas, como Martin Scorsese, que estrenará su esperadísima Killers of the Flower Moon de la mano de Apple. Muchos dan por segura su presencia en Cannes, pero para ello debe asegurar su estreno en salas, igual que ocurre con el Napoléon de Ridley Scott con Joaquin Phoenix como protagonista. Phoenix también está en lo nuevo de Ari Aster, director de Hereditary y Midsommar. Se llama Beau is afraid y tiene fijado su estreno —al menos en EEUU— en abril.
Quien debería estrenar este año es Francis Ford Coppola, que ha salido de su retiro para dirigir su soñada Megalópolis. Debería porque los últimos problemas en el rodaje con los efectos especiales han retrasado el proyecto, que empieza a tener ecos de Apocalypse Now. Quien sí estrenará es su hija, Sofia Coppola, que mirará a Elvis desde los ojos de su pareja en Priscilla. Regresa también Alexander Payne y lo harán por partida doble Wes Anderson —con Asteroid City, rodada en Chinchón, y The Wonderful Story of Henry Sugar— y el griego Yorgos Lanthimos, que tendrá que cuadrar los estrenos de Poor Things y AND.
Los festivales pueden ser el sitio donde muchos veteranos presenten sus nuevas películas. Roman Polanski tendrá que ver si se atreven a llevarle con su nuevo filme, The Palace. También está terminado el filme, todavía sin título, que ha rodado Woody Allen en Francia. Cannes parece el sitio perfecto para que Ken Loach luche por su tercera Palma de Oro con una nueva muestra de cine social en The Old Oak. Otro habitual de Cannes, el ruso Kirill Serebrennikov ha rodado la versión cinematográfica de Limonov, el inmenso libro de Emmanuel Carrère; y se espera con ansias la primera película de Jonathan Glazer tras Under the skin. Zone of interest huele al festival francés con una historia ambientada en la Segunda Guerra Mundial.
Quien en 2023 trae un buen arsenal es el cine italiano, que tiene listas las nuevas obras de Marco Bellocchio (La conversione), Mateo Garrone (Lo capitano), Nanni Moretti (Il sol dell’avvenire) y Alice Rhorwacher, la directora de una de las mejores películas de los últimos años, Lazzaro feliz, que regresa con La chimera. Sin embargo, el acontecimiento más esperado para el cine de autor será descubrir el legado fílmico de Jean-Luc Godard, que podría haber dejado rodadas dos obras, Scenario y Funny Wars. Sería el testamento cinematográfico del padre de la modernidad y uno de los eventos más bonitos y emocionantes del cine en 2023.