La nueva novela de María Dueñas rompe el tablero editorial
La nueva novela de María Dueñas, La templanza, llegará el 17 de marzo como un cohete. Su editorial, Planeta –la novela ya no estará dentro del sello Temas de Hoy como las anteriores El tiempo entre costuras y Misión olvido- ha decidido distribuir 500.000 ejemplares en todas las librerías españolas y en buena parte de América Latina. Una cifra extraordinaria en tiempos donde apenas hay ya megasellers (el último fue la trilogía de 50 sombras de Grey) y cuando la tirada media apenas está en los 3.000 ejemplares. Y, además, tras años de vacas flacas con bajada en las ventas en las librerías.
“Medio millón de ejemplares es una cifra enorme, pero ajustada a las expectativas comerciales. Sus novelas anteriores han vendido cifras muy superiores y la audiencia de la serie de El tiempo entre costuras fue de más de cinco millones de personas solo en España. Esos ingredientes, sumados a la calidad de La Templanza nos hacen sentirnos suficientemente seguros de que los lectores acudirán a las librerías, comprarán la novela y la recomendarán una vez leída”, afirma contundente su editora Belén López a eldiario.es. De hecho, Dueñas es la última escritora española que ha roto todas las cifras: más de un millón y medio de ventas de la historia de Sira Quiroga y cerca del millón de Misión olvido.
Este lanzamiento, no obstante, no es baladí. Ni está sujeto sólo al éxito que ya consiguiera la escritora hace algunos años. Tiene consecuencias para todo el sector. Algunas positivas y otras no tanto.
Una bendición para libreros y grandes cadenas
Una bendición para libreros y grandes cadenasLos que más han aplaudido esta apuesta son, sin duda, los libreros, que tienen sus cuentas temblando desde que estalló la crisis. Así, como afirma la presidenta de la Confederación Española del Gremio de Libreros (CEGAL), Pilar Gallego, “es algo muy bueno porque tiene tirón, y en los últimos años lo que hemos notado es que no ha habido libros con tanto tirón; si Planeta apuesta por eso es que ve posibilidades. Vendrá bien, y en una fecha donde siempre es más bajo”.
Precisamente, que sea en marzo tampoco es casual. Es una fecha que Planeta ya ha usado en otras ocasiones y como afirma Belén López, “permite llegar a los grandes hitos del primer semestre con la novela ya rodada y buscar el horizonte de la campaña de Navidad como colofón”. Y también permite llegar antes que nadie al aluvión de novedades que se preparan para Sant Jordi y la Feria del Libro de Madrid y evita el solapamiento con sus propias apuestas.
La editora reconoce, a su vez, esta buena receptividad por parte de los libreros: “Este tipo de fenómenos, asociados a autores que han vendido más de un millón de ejemplares, no ocurren todos los años y suponen una bendición para los libreros y el entorno editorial en general porque arrastran a las librerías a lectores de todo tipo, y ponen de moda nuevamente hablar de libros”.
En este sentido, López confía en que esta historia que transcurre en la segunda mitad del siglo XIX con un protagonista masculino entre México, la Cuba colonial y Jerez deslumbre a los lectores y cambie la tendencia en las librerías; sin embargo, Gallego también se muestra cauta y avisa: “Ningún libro salva ventas; ayuda. Lo hemos visto con el último de Ken Follett, que no ha tenido tanto tirón”. Y eso que la tirada de El umbral de la eternidad, de 300.000 ejemplares, fue más conservadora. Nada que ver con los 525.000 que Random House lanzó de Un mundo sin fin en 2007, en tiempos en los que aún había enormes lanzamientos.
Además, para la presidenta de los libreros quienes realmente se van a ver favorecidos son las grandes superficies –Alcampo, Carrefour- y las grandes cadenas como El Corte Inglés y La Casa del Libro e incluso La Central. “Las grandes pilas estarán en estos establecimientos, y a las librerías les vendrá bien para hacer sus apuestas”, sostiene Gallego.
“Duro” para los editores
“Duro” para los editoresDesde donde no se ve con tan buenos ojos este lanzamiento es desde el lado de los editores. Como explica Enrique Murillo, editor de Libros del Lince y con años en el sector editorial, lo que sucede con estos fenómenos es que “durante un mes, de los porcentajes que las grandes cadenas libreras tienen para comprar libros una parte importante se va a esos libros y hay menos dinero para los demás. Vienen meses duros”.
Además, como insiste Murillo, “las grandes cadenas hacen un negocio vendiendo espacios a los editores de estos libros. Por ejemplo, en El Corte Inglés o La Casa del Libro, ese espacio es comprado. El punto de venta cobra un dinero por poner en la mejor exposición posible ese libro. Y dado que el comprador de libros en España no está muy informado sino que compra lo que ve en las mesas novedades, es como si a las librerías les quitaran mesas en las que podrían estar otros libros”. Es decir, si María Dueñas inunda ese inmejorable espacio, que no está al alcance de todos los editores, habrá poco para el resto y en la tesitura actual nadie va a decir que no a este libro.
Es la estrategia que se pueden permitir los grandes grupos, no las medianas y pequeñas editoriales. Será el comprador el que decida, pero eso sí, en poco más de un mes van a ver el rostro de esta escritora por todas partes.