Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE
Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.
Olivia de Havilland demanda a FX por falsear su vida en la serie 'Bette y Joan'
Olivia de Havilland, la última leyenda viva de Hollywood, que este sábado cumplía 101 años, ha demandado a FX por su retrato en la serie 'Feud', en España Bette y Joan. La actriz ha presentado una denuncia en un juzgado federal de Los Ángeles, en la que acusa a los responsables de poner en su boca frases que nunca dijo y de inventar situaciones que nunca tuvieron lugar, sin contar con su autorización y dando a entender que son hechos reales. Técnicamente, es la única actriz que queda viva para discutir el retrato que hace la serie de la notoria rivalidad entre las dos actrices de carácter de la fábrica de sueños, Joan Crawford y Bette Davis.
Por ejemplo, en la serie Olivia de Havilland da una entrevista en los Óscar de 1978 “que nunca ocurrió”, donde hace declaraciones sobre Joan Crawford y Bette Davis que “son completamente falsas”. La actriz considera un agravante que el guión se invente las declaraciones pero pretenda añadir realismo a la escena replicando al detalle la imagen y vestuario reales que llevó realmente a la gala, cuando entregó el Oscar honorífico a su amiga Margareth Booth.
Melita nunca llamaría “puta” a su hermana
“Los acusados usurparon el nombre de Olivia de Havilland, su retrato e identidad sin su permiso y los usaron falsamente para explotar sus propios intereses comerciales”. La actriz dice que “Feud” la retrata como una “hipócrita” que “vendió cotilleos” para promocionarse en los Óscar.
En otra escena de Feud sale De Havilland llamando “puta” a Joan Fontaine, su hermana en la vida real. Aunque tuvieron, en efecto, una célebre enemistad, la veterana asegura que ese “ofensivo término” va en contra de su reputación de “buenos modales, clase y amabilidad”, y que se refirió a su hermana “con semejante vulgaridad”. Irónicamente, su rivalidad con Fontaine es lo más parecido a la de las dos hermanas de Qué fue de Baby Jane, la película que reunió a David y Crawford por última vez, y que da contexto a la serie Feud.
Mundialmente famosa por su papel de Melania Hamilton, rival de Scarlata O'Hara en Lo que el viento se llevó (1939), De Havilland recibió dos oscars, uno por La vida íntima de Julia Norris (1946) y otro por La heredera (1949), además de varias nominaciones y otros reconocimientos. “Olivia de Havilland ha construido una reputación profesional por su integridad, honestidad, generosidad, sacrificio y dignidad”, asegura la denuncia. Solo hace dos semanas que fue nombrada Dama del Imperio Británico.
Aunque se especializó en papeles de mujer dulce y confiada, la actriz fue la primera en desafiar y derrotar al todopoderoso sistema de los grandes estudios del Hollywood dorado, acabando con las abusivas condiciones laborales a las que estaban sometidos los artistas. Especialmente las mujeres.
La “Ley de Havilland” que lo cambió todo
Cuando, en los años 40, la actriz exigió a Jack Warner que ampliara su cartera de personajes o la dejara trabajar para otro estudio. El estudio la “suspendió”, dejándola sin empleo y sueldo durante tres años, pero negándose a cederla a otro estudio y alargando el contrato con el tiempo de suspensión.
Era la clase de contrato que tenían los actores de la época. después de siete años, Olivia encontró un agujero en la legislación californiana que le permitió llevar a la Warner a la Corte Suprema. El litigio “De Havilland vs. Warner Bros.” duró dos años y medio, durante los cuales no pudo trabajar ni cobrar y fue retratada por su propio estudio como una diva insoportable, caprichosa y mala profesional.
Pero ganó, por ella y por todos sus compañeros. Consiguió introducir la Ley De Havilland en la jurisprudencia americana, acabando con los “suspensos” de la industria, y liberando a los actores y actrices de una práctica cercana a la esclavitud.
Feud es el último proyecto de Ryan Murphy, productor y guionista de éxitos como American Horror Story o Glee. Incluye a Jessica Lange como Joan Crawford y a Susan Sarandon como Bette Davis. El papel de Olivia de Havilland ha sido interpretado por Catherine Zeta-Jones,