En el único debate cara a cara entre los candidatos de PSOE y PP a la presidencia del Gobierno no se habló de cultura. PP y Vox han presentado en actos respectivos sus propuestas en materia de política cultural y representantes de los cuatro partidos principales se han confrontado en un acto y lo volverán a hacer este jueves, en Madrid.
Estas son las proposiciones concretas que PSOE, PP, Sumar y Vox han llevado a sus programas, aunque no afloren en un bronco debate público encallado en las censuras que está promoviendo Vox en los ayuntamientos en los que ocupa concejalías gracias a los pactos con el PP.
PP: España como “potencia cultural” mundial
- Reforzar el Instituto Cervantes. Si gobierna, el PP ampliará las sedes de este organismo cultural que depende del Ministerio de Asuntos Exteriores. Durante el mandato del director actual, Luis García Montero, nombrado por Pedro Sánchez, se han abierto dos nuevas sedes (Dakar y Los Ángeles) y siete extensiones, que son dependencias en ciudades próximas a una sede que ya existe (El Paso, Edimburgo, Tesalónica, Melbourne, Andorra, Ámsterdam y Ramala). No obstante, el principal problema del Cervantes no es la implantación (está presente en 90 ciudades de 45 países del mundo) sino los salarios de sus trabajadores, congelados desde 2009. Una nueva huelga entre sus empleados en todo el mundo ha sido convocada el 10 y el 11 de julio.
- Nueva ley de patrimonio cultural. El PP plantea refundir la legislación vigente en patrimonio. España cuenta con la Ley del Patrimonio Histórico Español de 1985. El Gobierno de Mariano Rajoy la modificó en 2015 para incluir la salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial.
- Nueva ley de mecenazgo. Los incentivos fiscales para fomentar la inversión privada en la cultura están regulados desde 2002, cuando se actualizó la ley de 1994 para introducir el término “mecenazgo” e impulsar las pequeñas donaciones con importantes porcentajes de deducción sobre todo en los tramos más bajos. El PP no indica qué aportaría de nuevo esta ley o si variarían los porcentajes de deducción. Solo apunta que hay un “exceso de burocracia”.
- Completar el Estatuto del Artista. Los populares anuncian que terminarían el trabajo iniciado por el Gobierno socialista tal y como está previsto. Tan solo indican que, como mejora, simplificarán el régimen de prestación de desempleo, modernizarán el sistema de jubilación y promocionarán incentivos fiscales en los trabajos culturales.
- Reforma del INAEM. Iceta anunció una reforma del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música que no se ha realizado. El PP promete la reforma del INAEM, adaptando su régimen jurídico, sus sistema de gestión y control económico-financiero. También apuesta por la creación de un Centro Nacional de la Danza (una casa para las compañías nacionales de danza y ballet), promovido mediante fórmulas de mecenazgo, por lo que apunta a la entrada de capital privado para crear este centro. Además, propone reforzar el programa de circulación de espectáculos de artes escénicas PLATEA.
- Subvenciones. El PP plantea abrir nuevas líneas de apoyo a la cultura creada por los jóvenes y de financiación del audiovisual. También quiere apoyar la producción de videojuegos.
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PSOE: La cultura como “cuestión de Estado”
- Pacto de Estado por la Cultura. El objetivo principal del Partido Socialista es promover un Pacto de Estado con el resto de las fuerzas políticas y administraciones. Su grupo parlamentario en el Congreso ya lo propuso en 2020 mediante una Proposición no de Ley, que se aprobó y que instaba al Gobierno a realizarlo en el plazo de dos años, algo que no sucedió.
- Reforma del INAEM. Al igual que el PP, el PSOE también propone la reforma de este organismo dependiente del Ministerio de Cultura, con el objetivo de dotarlo de mayor autonomía y “exhibición territorial”, lo cual apunta a una voluntad de hacer actuar al INAEM de manera menos centralista. También coincide con el PP en el refuerzo del programa PLATEA. Si respecto a la danza el PP propone un centro en colaboración con capital privado, el PSOE lo que plantea es un Plan Nacional de Danza donde también se dé entrada al sector privado. Además, pondrían en marcha una Red Nacional de Centros Coreográficos.
- Completar el Estatuto del Artista. El PSOE quiere finiquitar el proyecto estrella de su Gobierno en materia cultural, al que le falta resolver el reconocimiento de la intermitencia laboral de los trabajadores culturales.
- Dos centros nacionales: Fotografía (ya encarrilado) y Tabacalera. El PSOE quiere crear en la próxima legislatura el Centro Nacional de Fotografía, un proyecto ya en curso en Soria, y el Centro de Tabacalera (en Madrid) como un lugar de producción artísticas y residencias artísticas y culturales. Este último se trata del edificio de la Antigua Fábrica de Tabacos de Madrid, gestionado por el Ministerio de Cultura desde el año 2003 (durante el segundo Gobierno de Aznar). El objetivo era crear allí el Centro Nacional de las Artes Visuales pero nunca se hizo. Una parte del edificio fue cedida a un colectivo para la gestión ciudadana (Centro Social Autogestionado) y otra para la sala de exposiciones Tabacalera Promoción del Arte. Este punto del programa del PSOE parece indicar el fin de la cesión al colectivo que lo ha gestionado durante diez años.
- Creación del Foro transversal de la cultura. Un instrumento de gestión transversal interministerial de Cultura con Educación, Transición Ecológica, Ciencia y Sanidad.
- Creación de un Comité Asesor Juvenil. Para que los jóvenes participen en el diseño de políticas culturales.
- Tramitar la ley del cine. El adelanto electoral fue un jarro de agua fría para los productores cinematográficos, que estaban esperando su aprobación sobre todo para corregir la definición de productor audiovisual que estableció la Ley General Audiovisual. El PSOE promete sacarla adelante si gobierna.
- Creación de una Mesa de la Música. Para la colaboración público-privada y la internacionalización del talento musical.
- Llevar el cine donde no hay salas. Con un programa de cine de verano en municipios sin salas de cine.
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Sumar: La cultura como “derecho esencial”
- Ley de Derechos Culturales. Sumar quiere garantizar derechos como la libertad de expresión y el acceso a la cultura con la creación de una ley de derechos culturales, acompañada de un proyecto económico que garantice su implementación.
- Bono Cultural para jóvenes en un sentido extenso. El proyecto de Yolanda Díaz quiere extender el Bono que instauró Iceta a toda población entre los 16 y los 30 años.
- Plan estatal de cultura y Mesa de cultura. Sumar planeta la necesidad de coordinar todos los esfuerzos en materia de política cultural, entre instituciones y diferentes administraciones.
- Reforma del INAEM, Agencia estatal de cine y Centro Nacional de Danza. Al igual que PP y PSOE, Sumar también advierte la necesidad de redefinir el INAEM, así como el ICAA (el instituto dedicado al cine) y la creación de una Agencia Estatal de Cine y el Audiovisual. Al igual que el PP, también propone la creación del Centro Nacional de Danza.
- Completar el Estatuto del Artista y resto de leyes truncadas en la anterior legislatura. Yolanda Díaz quiere reemprender la ley del cine, de las enseñanzas artísticas y de la ley que articula la nueva oficina de los derechos de autor.
- Nueva ley de patrimonio cultural. Coincidiendo con la propuesta del PP, Sumar también apuesta por una nueva ley que cuide el patrimonio de una manera más amplia y diversa que la ley actual, enfocada principalmente al patrimonio histórico.
- Nueva ley del mecenazgo. Como el PP, Sumar también quiere revisar los incentivos fiscales. Pero además, propone incorporar una casilla cultural a la declaración de la Renta para financiar proyectos culturales.
- Completar el Estatuto del Artista. Como los demás partidos, Sumar terminará si gobierna las reformas emprendidas en la legislatura anterior, tanto el Estatuto como la ley de enseñanzas artísticas.
- Contratos menores hasta 50.000 euros. Sumar quiere modificar la Ley de Contratos del Sector Público para adaptarla a la especificidad del sector cultural. Entre todas las revisiones jurídicas, se encuentra aumentar para los contratos del ámbito de la cultura el tope para ser considerado contrato menor, de 15.000 a 50.000 euros, como ya se hace en la ciencia. También quiere revisar la aplicación de los procedimientos negociados sin publicidad, con el que se firman muchas contrataciones públicas en el ámbito artístico.
- Incrementar el presupuesto de cultura hasta el 1% en cuatro años. Sin contar los fondos europeos, Sumar propone que la inversión en cultura de los Presupuestos Generales del Estado llegue al 1%, juntando la aportación desde diferentes ministerios.
- Estatuto para la Creación Digital. Este cuerpo legislativo serviría para proteger los derechos de los trabajadores del ámbito de la cultura digital. Para ello, desarrollarían un Plan de Infraestructuras Digitales Públicas para garantizar el acceso, el alojamiento, la distribución y la protección de obras en el ámbito digital, y una Agencia pública de auditoría del algoritmo y la inteligencia artificial.
- Regular el ejercicio del periodismo. El partido de Díaz quiere elaborar un Estatuto de la Información que permita instaurar un código deontológico para combatir la desinformación, mediante un Consejo Estatal de los Medios Audiovisuales (CEMA). En el tramo final del Gobierno de Zapatero, en 2010, se aprobó la Ley General de Comunicación Audiovisual, que contemplaba este Consejo, pero el PP lo eliminó en 2012 en su reestructuración de los organismos reguladores. El CEMA que propone Díaz tendría carácter regulador, supervisor y sancionador.
- Transparencia en las ayudas a la producción cinematográfica que hacen las televisiones públicas. Las televisiones públicas están obligadas a invertir en audiovisual pero el proceso de selección no es actualmente transparente.
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Vox: La cultura como identidad nacional
- Potenciar la lengua española en el extranjero. En una línea coincidente con el PP, Vox quiere apoyar la lengua española en el exterior utilizando la herramienta que ya existe para ello, el Instituto Cervantes. No ofrece más detalle.
- Potenciar las fiestas populares. Porque son “señas de identidad” de la “historia milenaria” de España. No explican cómo lo harían.
- Las fachadas BIC. El partido de Santiago Abascal quiere “un urbanismo amable para las familias” y para ellos propone fomentar la rehabilitación de los “estilos regionales” y proteger “las fachadas tradicionales” incluyéndolas en los catálogos de bienes de interés cultural.
- Defensa de la tauromaquia. El programa de ultraderecha dedica tres puntos a los festejos taurinos, los cuales quiere proteger, apoyar con medidas fiscales y crediticias, e impulsar la defensa y conservación del toro de lidia, la cual considera que está en desaparición.
- Combatir “el borrado del legado español en América”. Vox pretende impulsar iniciativas culturales y educativas, sin especificar cuáles, tanto en España como en el extranjero, para combatir lo que llaman “leyenda negra” y dar a conocer “la labor civilizadora de España en América” y la preservación del “legado español en Guinea Ecuatorial y Filipinas”. Es decir, una cultura y una educación que defienda el colonialismo, que es el régimen político y económico en el que un Estado controla y explota un territorio ajeno al suyo, como hizo el Imperio Español entre el siglo XVI y el XIX, y que fue contestado con las guerras de independencia en el siglo XIX.Todavía a día de hoy, los territorios que fueron conquistados han de lidiar con la herencia de colonialismo cultural.
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