La Guardia Civil devolverá a Senegal a los 168 migrantes rescatados en Mauritania tras la negativa de Nuakchot a su desembarco

Ante la negativa de Mauritania de permitir el desembarco de 168 migrantes rescatados por la Guardia Civil a 80 millas de la costa mauritana el pasado jueves, la patrullera Río Tajo ha recibido instrucciones para devolver a estas personas a Senegal, el país desde donde partió el cayuco, según ha adelantado El País y confirman a elDiario.es fuentes próximas al episodio. El rechazo de las autoridades mauritanas al desembarco choca con la habitual colaboración del país africano con España en materia migratoria.

El Ministerio del Interior, que rechazó en todo momento la posibilidad de atracar en Canarias, no confirma ni desmiente que estas personas vayan a ser devueltas a Senegal. “Se han realizado las actuaciones pertinentes para alcanzar la solución y esperamos que las gestiones den sus frutos en las próximas horas”, dicen fuentes del departamento dirigido por Fernando Grande-Marlaska. El buque, que llevaba horas dando vueltas en los alrededores de la bahía de Nouadhibou (Mauritania), ha puesto ya rumbo a Senegal, según el rastro de su navegación registrado en Marine Traffic.

La negativa de Mauritania no es habitual y evidencia el rol del país africano en el control migratorio hacia España. Fuentes del Ministerio defienden que el episodio no pone en riesgo las relaciones entre ambos países, que a juicio de Interior siguen siendo “muy buenas”. Interior destaca que en 2021 llegaron 55 embarcaciones a Canarias procedentes de las costas mauritanas mientras que en 2022 llegaron cinco pateras. En lo que va de año, también han arribado al Archipiélago cinco barcas desde el país africano. La presión migratoria desde Senegal a Canarias ha aumentado en los últimos meses, con la llegada de decenas de cayucos a las islas, lo que ha podido influir en la decisión de Mauritania.

La Asociación Unificada de Guardias Civiles, la asociación profesional de la Guardia Civil, ha denunciado las “condiciones penosas” en las que están los agentes y los migrantes. Los migrantes se encuentran “hacinados” y, durante estos días, tienen que orinar en cubos. “Demandamos una solución por las condiciones de seguridad e higiene”, decía Pedro Carmona, portavoz nacional de la asociación. Desde Interior aseguran que la situación de seguridad a bordo está “controlada”, después de que los agentes efectuasen un par de disparos al aire disuasorios ante las protestas de los migrantes, según fuentes policiales.