Podemos ha registrado esta tarde en el Congreso una proposición de ley a la que ha bautizado con el título “sobrevivir no es delito” y que pide despenalizar la venta ambulante para acabar, dicen, con la “persecución y criminalización sistémica de estas personas que intentan buscarse la vida”.
La coportavoz del partido morado, Noelia Vera, ha recordado en una rueda de prensa durante la mañana de este lunes que antes de la reforma del Código Penal de 2015, la venta ambulante estaba castigada con multa administrativa, mientras que ahora se ha convertido en un delito con pena de cárcel de seis meses a dos años.
“La situación actual supone una regresión respecto a la regulación anterior y condena a personas migrantes en situación administrativa irregular a una suerte de muerte social porque, al mismo tiempo, tipifica como delito la única forma de ganarse la vida”, sostiene el texto, al que ha tenido acceso eldiario.es.
Además, recuerdan, “les genera unos antecedentes penales que les imposibilita regularizar su situación en nuestro país mediante los procedimientos legalmente establecidos en nuestro ordenamiento”.
“Una situación desproporcionada que busca criminalizar el único medio de subsistencia de un sector altamente vulnerable”, sostiene Podemos. Los colectivos de manteros de todo el Estado español llevan más de un año luchando por sacar la venta en el top manta del código penal.
En este sentido, la formación morada ya presentó en abril de 2016 una proposición no de ley con una iniciativa similar, en la que trabajaron con los colectivos implicados, y ahora ha decidido retomar su petición registrando una proposición de ley pocos días después de los sucesos ocurridos en el barrio madrileño de Lavapiés tras la muerte de Mame Mbaye cuando llegaba a su casa después de que se produjera una persecución policial contra los manteros.
Vera ha aprovechado para reiterar las condolencias de su partido a los amigos del fallecido, y ha recalcado que tras lo ocurrido hay “un debate de fondo” que tiene que ver con la “precariedad y miseria a la que estos compañeros están siendo condenados desde hace mucho tiempo”.
“En este país es tan curioso que si uno defrauda tiene una sanción administrativa, pero si vende un bolso en la calle tiene dos años de cárcel”, ha enfatizado Vera.