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Competencia comparte en su informe sobre el alquiler turístico en España argumentos del lobby de Airbnb en Bruselas
Coinciden en sus recomendaciones de evitar la burocracia de la autorización previa, la limitación del número de noches y en argumentos como que el ruido y las molestias son propias del turismo, y no del alojamiento turístico
El regulador español, que asegura que las coincidencias son una casualidad, en algunas cuestiones va más lejos que la Comisión y que el lobby de Airbnb
La CNMC ha emitido un informe que repite varios argumentos de la European Holiday Home Association (EHHA), algunos de ellos asumidos también por la Comisión Europea
La Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) ha hecho público esta semana un informe sobre el alquiler turístico en España, una de cuyas conclusiones más relevantes es que no hay “evidencia empírica robusta” que “respalde la magnitud” de “la presión” de los alojamientos turísticos sobre los precios de la vivienda. Algunos estudiosos de los fenómenos urbanísticos se han apresurado a desmontar sus tesis y hacer públicos informes que sí defienden que la mayor rentabilidad del alquiler a turistas a través de plataformas como Airbnb detrae oferta del mercado de larga duración y sube los precios, aunque ninguno de ellos se refiere al caso español.
Pero además, el informe del organismo que vela por consumidores y empresas españolas coincide en varias de sus conclusiones y recomendaciones con los del lobby de Airbnb en Bruselas, la Asociación Europea de Casas de Vacaciones (EHHA en sus siglas en inglés). En un breve documento llamado “Visión”, la asociación que trata de influir en las decisiones de la Comisión Europea plantea una serie de argumentos que la CNMC plasma de manera muy similar en su informe. Fuentes del organismo regulador aseguran al respecto que se trata de una “casualidad” y que lo que ellos defienden es que debe encontrarse un “equilibrio” entre los distintos intereses. De hecho en varias ocasiones el regulador español va más lejos.
La Comisión Europea, con quien la CNMC mantiene un contacto frecuente, también se ha alineado en el pasado en varios puntos con la organización que defiende los intereses de plataformas como Airbnb y HomeAway, por ejemplo en lo tocante a la obtención de licencias previas. Lo hizo en su comunicación sobre economía colaborativa de 2016. Sin embargo, sí se muestra partidaria de la limitación del número de días, frente al criterio de EHHA y la CNMC. El Ejecutivo comunitario está ahora en proceso de elaboración de unas guías concretas sobre alquiler turístico.
El investigador del Observatorio Empresarial Europeo (Corporate Europe Observatory) Kenneth Haar, tras examinar las conclusiones y recomendaciones del informe de la CNMC, asegura que tiene “la sensación de haberlo visto antes. Parece un ejercicio de copiar y pegar. Estas propuestas son idénticas a las impulsadas por AirBnB, EHHA y otros grupos de presión de la plataforma en las instituciones de la UE. No puedo detectar ninguna desviación significativa”.
Esta organización de vigilancia de los grupos de presión ante la UE publicó hace unos meses el informe “Unfairbnb”, en el que denuncia lo que consideran una cierta connivencia con la CE, que Bruselas niega. La EHHA ha presentado quejas contra la regulación del alquiler turístico en Barcelona, Berlín, París y Bruselas ante la Comisión Europea, que aún siguen su curso.
“Es bastante preocupante ver esto en un informe de un grupo que, se supone, debe tomar en consideración los intereses públicos, no solo los intereses de las grandes compañías”, afirma Haar.
La CNMC va incluso más lejos
En general tanto la Comisión como la EHHA tienden a ofrecer mensajes generales en sus comunicaciones públicas, y dejan cierto espacio para la interpretación. Pero la CNMC va más allá en aspectos concretos como mostrarse contraria a prohibir que las viviendas de uso turístico (VUT) se instalen en edificios residenciales; o criticar obligaciones como ubicarse en determinadas plantas; tener placas distintivas; libros-registro o la comunicación de precios a la administración.
“Estos aspectos nunca han sido abordados de manera tan concreta por la CE, y las protestas de la EHHA también son más genéricas”, abunda Haar. De hecho, no se conoce públicamente el detalle de las quejas que presentó esta organización ante la Comisión por las medidas adoptadas en Barcelona, Berlín, París y Bruselas.
Sobre el hecho de que la CNMC niegue el impacto sobre precios de los alquileres, el investigador se muestra “sorprendido”. “Es embarazoso que un organismo público recurra a la demagogia en las discusiones clave relacionadas con el alquiler a corto plazo”. “Ciertamente es cierto que hay más de una razón para las alzas de alquileres, pero estamos observando una de ellas. Se ha investigado en muchas ciudades, pero los autores parecen elegir deliberadamente mirar hacia otro lado”.
Para esta organización, el informe de la CNMC demuestra ser “completamente miope”. “El riesgo de transformar los entornos locales en poco más que parques temáticos simplemente se descarta en el informe. Como si se tratara simplemente de un presentimiento, afirman que no está relacionado con el alojamiento turístico. Es una afrenta para aquellos que han visto sus vecindarios remodelados ante sus ojos”, afirma Haar.