Accionistas de Bankia increpan a la junta directiva en la asamblea general del banco
¡Ladrones!“, ”¡quiero mi dinero!, ¿me oyes?, ¡mi dinero!“, ”mangante, sinvergüenza“, ”menos cuento, ¡así con ese rollo nos engañasteis!“. Son algunos de los insultos que los accionistas de Bankia han gritado al presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri, actual presidente de Bankia. El banquero ha dado un discurso con ocasión de la junta general de accionistas, que se celebra hoy en Valencia. Al acto han acudido centenares de accionistas que han abucheado a los directivos. La estampa resultante era de una docena de ejecutivos con traje en el escenario que aguantaban estoicos los gritos del público, en el que abundaban jubilados y personas sin corbata.
Goirigolzarri, por su parte, no interrumpió en ningún momento su discurso ni dio muestras de estar oyendo las descalificaciones que le llovían desde la audiencia. “Los beneficios de este trimestre nos hacen pensar que estamos en la buena dirección”, decía el banquero, mientras varias mujeres se levantaban y gritaban “¡mis hijos no comen!”. En algunos momentos la voz del directivo se perdía entre los abucheos, pero él continuaba imperturbable con su discurso, en el que e resaltaba la gestión de Bankia: “Nuestro objetivo es aumentar el crédito, y no son solo palabras”. Después de Goirigolzarri, ha comenzado el turno de palabra de los al menos 130 accionistas que la habían solicitado. Muchos de ellos son también “preferentistas”, ya que para obtener liquidez en este tipo de productos se tenía que acudir a un canje de acciones de la entidad financiera. Desde entonces, las acciones han perdido un 99,8% de su valor. En esta situación, cunde la desesperación. “Usted su guardaespaldas y sus cócteles, y a nosotros que nos den por el culo. Ya nos hemos quitado la venda, nosotros no somos economistas, somos los que pasamos la guerra, y no tenemos ni graduado escolar”, dijo Fernanda Climent, la primera accionista en tomar la palabra. Climent es una anciana que vio cómo la herencia de su madre, 84.000 euros, pasó de plazo fijo a preferentes sin que ella llegara a autorizarlo, según su propio testimonio.
Mientras, en la entrada del auditorio varias decenas de accionistas intentaban entrar al recinto, aunque varios agentes de seguridad lo impedían debido al lleno de la sala. El resultado fue un tumulto y una gran pitada. Dentro, otro de los accionistas insinuó que las primeras filas del público estaban llenas de personas afines a Bankia. “Cuando he entrado en esta sala, la mitad estaba llena, ¿por qué?”. Y concluyó: “Qué difícil es decir Goirigolzarri, con lo fácil que es decir Alí Babá”.
Pese a que Goirigolzarri ha sido el sujeto de las críticas y de los abucheos, cabe recordar que el banquero no estaba al frente de la entidad ni cuando se emitieron las preferentes ni cuando esta salió a bolsa. El exresponsable de BBVA se ha comprometido a maximizar el valor de la entidad para los propietarios, esto es, todos los españoles, y devolver las ayudas. En este sentido, en su discurso aseguró que Bankia no va a necesitar más capital.