El objetivo es el TTF holandés. El mercado mayorista que influye decisivamente en el precio del gas en el resto de Europa, porque no es capaz de fijar un precio adecuado, entre otras cosas, al gas natural licuado, cada vez más presente en la UE en la medida en que se está desconectando del gas ruso.
La Comisión Europea ha difundido entre los 27 una propuesta en forma de borrador sobre un mecanismo temporal, de hasta un año de duración, para evitar que los precios se desboquen en el principal mercado europeo, con el efecto contagio que eso supone.
“El mecanismo propuesto consiste esencialmente en un techo de seguridad para el precio de los derivados TTF con un mes de antelación (precio TTF), que desempeña un papel clave como precio de referencia en el mercado mayorista europeo de gas”, dice el documento de la Comisión Europea: “El techo se activa si la base del precio TTF alcanza un nivel predefinido y si el aumento del precio no corresponde a un aumento similar a nivel del mercado mundial (comparación con los precios del gas natural licuado)”.
El texto de Bruselas prosigue: “Para garantizar un efecto inmediato, se propone que los valores para activar el mecanismo se fijen por adelantado, a fin de evitar largos procedimientos de toma de decisiones que podrían retrasar significativamente su activación y el efecto de reducción de precios deseado”.
En efecto, el texto no establece esos precios máximos a partir de los cuales se activaría el tope.
“Con vistas a posibles cambios en la situación del mercado, y para poder reaccionar ante posibles consecuencias negativas no deseadas del límite de precio”, dice el Ejecutivo comunitario, “deben incorporarse en la propuesta salvaguardias eficaces para garantizar que el mecanismo pueda suspenderse en cualquier momento si llegara a dar lugar a graves perturbaciones del mercado que afecten a la seguridad del suministro y a los flujos dentro de la UE. El límite de precio se desactivaría automáticamente si una revisión mensual muestra que las condiciones para su activación ya no se dan. El cumplimiento de los objetivos de reducción de la demanda de la UE también debe tenerse en cuenta al evaluar los efectos del mecanismo”.
“La Comisión está trabajando en estrecha colaboración con los Estados miembros y está plenamente comprometida a avanzar sin demora con propuestas concretas para un mecanismo eficaz de corrección del mercado respetando plenamente las conclusiones del Consejo Europeo y los principios establecidos en el mismo”, decía una carta enviada por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y el primer ministro checo y presidente de turno del Consejo de la UE, Petr Fiala, el viernes pasado a los líderes de la UE: “La UE necesita disponer de un mecanismo que limite episodios de precios excesivos del gas como los que hemos vivido en agosto”.
Así, el Ejecutivo comunitario ha presentado “un esquema detallado de la propuesta de un mecanismo de corrección del mercado ('tope temporal del precio del gas') que tenga en cuenta las condiciones y garantías solicitadas por los Estados miembros, a tiempo para que los ministros lo discutan en la reunión de ministros de energía del 24 de noviembre”.