Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Feijóo confía en que los jueces tumben a Sánchez tras asumir "los números"
Una visión errónea de la situación económica lleva a un freno del consumo
OPINIÓN | La jeta y chulería de Ábalos la paga la izquierda, por Antonio Maestre

Un documental retrata la desidia de la Administración con la balsa de fosfoyesos de Huelva

Fotograma del documental 'Un lugar diferente'.

A. M. V.

“En Huelva todavía hay gente que piensa que eso es simplemente una salina, nada más”, dice Rafael González, codirector de 'Un Lugar Diferente', documental estrenado esta semana en Madrid que denuncia los problemas medioambientales, sociales y de salud pública asociados al Polo Industrial de Huelva.

Dirigido por dos periodistas (González y Eduardo López-Jamar), expone la situación actual de Huelva tras décadas de connivencia de las administraciones con los desmanes de diferentes empresas y, singularmente, del fabricante de fertilizantes Fertiberia, propiedad del exministro Juan Miguel Villar-Mir.

González, onubense que lleva casi veinte años en Madrid, habla de algo mucho más peligroso que una inofensiva salina: los denominados fosfoyesos, una balsa de 1.200 hectáreas de extensión a tiro de piedra del núcleo urbano de Huelva en la que se almacenan millones de toneladas de residuos químicos con niveles de radiación por encima de lo permitido.

Esa balsa, en la antigua marisma de Huelva, simboliza lo que algunos grupos ecologistas han bautizado como “uno de los mayores desastres de Europa”, por sus dimensiones físicas y su longevidad. Y es parte de Huelva, por mucho que le pese a su alcalde desde hace 20 años, Pedro Rodríguez, cabeza de lista del PP para esa ciudad en las próximas elecciones municipales.

El documental recoge el enfado de Rodríguez cuando se le interroga por el problema de los fosfoyesos. “No conozco el tema de la empresa”, llega a decir, tras asegurar que “este alcalde lo que quiere es que ningún onubense tenga preocupación por si los residuos de fosfoyesos son contaminantes, son radiactivos”. Al final, se va, harto de preguntas sobre el asunto: “Estamos hablando de fosfoyesos nada más, desde que hemos empezado a hablar, no de Huelva, ¡coño!”, dice, antes de levantarse de la silla.

La cinta prescinde de un narrador y se apoya en imágenes propias y de archivo (por ejemplo, del mítico programa de TVE 'Línea 900'), testimonios y diferentes entrevistas a, entre otros, representantes del movimiento ecologista, Joan Benach, investigador de la Pompeu Fabra que dirige el Atlas de la Mortalidad de España, o al portavoz de las empresas del Polo Químico (único interlocutor ofrecido por Fertiberia), que cuestiona los informes científicos que alertan de la elevada mortalidad por cáncer en la provincia (“La noticia no es la realidad”, dice).

También aborda el tema de las denominadas puertas giratorias a través de figuras como el propio Villar-Mir, el exsecretario de Estado estadounidense Henry Kissinger o la actual ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina.

El documental llega en un momento oportuno. La Audiencia Nacional ha obligado a Fertiberia, adquirida en 1995 a Torras, grupo entonces dirigido por Josep Piqué, a la postre ministro del PP y hoy consejero delegado de OHL, la constructora de Villar-Mir, a devolver la zona a su estado original “en el plazo más breve posible”, exigencia que está pendiente de cumplirse.

La empresa química pretende salvarla cubriendo parte de la zona con una membrana protectora, capas de yeso y arcilla y algunos árboles. El plan de regeneración ambiental que ha propuesto depende del visto bueno de la Junta de Andalucía y del Ministerio de Agricultura, cuya máxima responsable, García Tejerina, fue directiva de Fertiberia entre 2004 y 2012. Casualidades de la vida.

Etiquetas
stats