La economía española creció un 3,2% en 2015, el mayor ritmo desde 2007
La economía española consiguió en 2015 expandirse a una velocidad no vista desde los tiempos de la bonanza económica. Según los datos provisionales publicados por el INE, el PIB creció en el conjunto de 2015 un 3,2%, la tasa más alta desde 2007, un año antes de que estallara la burbuja financiera.
La tasa queda una décima por debajo de la previsión oficial del Gobierno que cifraba en un 3,3% la subida final para todo el año. Lo cierto es que una décima es prácticamente inapreciable en términos de PIB ya que las revisiones estadísticas a las que se suelen someter estos indicadores corrigen muy habitualmente una cifra al alza o a la baja. La cifra se queda algo por encima de lo esperado por el FMI que situaba en un 3,1% el crecimiento para el ejercicio de 2015.
Para mantener un ritmo de creación de empleo como el visto en 2015 se necesitaría seguir creciendo a tasas próximas o superiores al 3%. La mejora estadística no es suficiente por sí sola para generar todo el empleo necesario. Cabe recordar que con su previsión de crecer un 3,3%, el Ejecutivo del PP planteaba que en 2015 se llegaran a crear 602.000 ocupados más. Aunque la creación de empleo ha sido muy alta, se ha quedado en casi 80.000 puestos de trabajo por debajo de lo que estimaba Economía.
El dato que se ha conocido no está detallado, esto es, no describe qué componentes han tirado de la actividad económica en 2015 ya que es una estimación que se confirmará de forma desagregada el 25 de febrero. Pero si se repite el patrón de trimestres anteriores, el consumo habría vuelto a ser el principal acicate de la mejora económica.
En el último trimestre del año, la economía se impulsó un 3,5% frente al mismo trimestre de un año antes. Y si se toma la mejora desde el verano, la mejora es del 0,8%. Los buenos datos de la Encuesta de Población Activa de un día antes ya reflejaban esta subida.
De cara a 2016, el Ejecutivo plantea una subida de nuevo del 3% pero por ahora los analistas son cautos ya que la situación económica internacional no permite optimismos. Recientemente, Luis de Guindos aseguró que de mantenerse los precios del petróleo, España podría llegar a crecer hasta un 3,5%. Las previsiones de analistas y organismos internacionales dejan por ahora la subida del año 2016 en un 2,7%.
El mismo día que se ha publicado el dato de PIB de 2015 se ha conocido la inflación de enero de 2016 que vuelva a entrar en terreno negativo. El IPC del primer mes del año cayó un 0,3%, después de que hubiera acabado 2015 en una tasa del 0%. El hecho de que una economía crezca a tasas tan altas como el 3% sin tirar de los precios es un fenómeno atípico que hunde sus raíces en la precipitada caída del precio del petróleo. Con todo, es una situación anómala que los expertos cuestionan que se pueda sostener en el tiempo.
