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La gran banca cierra un mal año con una caída del 19% en su beneficio

Los seis principales bancos españoles (Banco Santander, BBVA, Caixabank, Bankia, Sabadell y Bankinter) echan el cierre a su complicado año 2019 con un retroceso en el beneficio del 19%, hasta situarse algo por debajo de los 13.600 millones de euros. Rompe con una tendencia ascendente en los ejercicios anteriores, incluido el 2018 cuando el resultado se disparó por encima del 20%.

Las entidades han hecho frente a distintos factores que han arrastrado sus beneficios como los grandes ERE que han efectuado grupos como Santander o Caixabank, los bajos tipos de interés que afectan a su rentabilidad o, en el caso de los más grandes, el complicado contexto en algunos mercados.

Destaca por encima del resto el BBVA, en el que ha sido el primer ejercicio de Carlos Torres como presidente de la entidad y del turco Onur Genç como consejero delegado. El grupo ha ganado un 35% menos en 2019, hasta los 3.512 millones. La compañía asegura en la documentación presentada al mercado que esta caída se produce por la venta de su negocio en Chile, los ajustes contables que ha tenido que hacer en EEUU por la evolución de la economía, o la situación en Argentina. Además, el ejercicio ha estado marcado por el caso Villarejo, que ha salpicado de lleno a la compañía y a su anterior presidente, Francisco González. Este jueves, la Fiscalía pidió que se levantara el secreto sobre este caso.

Le sigue Bankia. La entidad pública ha cerrado 2019 con un recorte del 23% respecto al anterior ejercicio. Atribuye el descenso a los costes para desprenderse de los activos tóxicos en su balance o la ausencia de operaciones financieras que hizo en el año anterior. El grupo que preside José Ignacio Goirigolzarri, que sufrió un castigo en Bolsa tras la presentación de las cuentas, ha tenido que incrementar el porcentaje de sus beneficios que destina a dividendos -lo que en jerga financiera se llama pay-out-, para poder mantener el nivel de retribución a sus accionistas, principalmente el Estado. El fondo de rescate bancario recibirá unos 210 millones de euros.

Las otras entidades que ven sus beneficios caer son Santander y CaixaBank. En el caso del grupo que preside Ana Botín ha cerrado el año con un retroceso del 16,6% en su beneficio, hasta situarse en unos 6.515 millones de euros. Atribuye este descenso a gastos que son excepcionales, como los costes de los ERE en España o Reino Unido, así como los ajustes por el Brexit.

La entidad catalana, por su parte, retrocede un 14% en sus ganancias. Justifica que esto se debe al coste del ERE que realizó el año pasado, al igual que Santander. En este caso, el grupo barcelonés defiende que sin este coste, los beneficios habrían crecido un 20%.

Las únicas entidades que crecen al cierre del año pasado son Bankinter y Sabadell. En el caso del grupo que dirige María Dolores Dancausa, la compañía ha incrementado un 4,6% su beneficio en el año en el que integró a EVO. El grupo catalán ha dado por terminada su crisis con la absorción de su filial británica, TSB, y se anota un incremento del 134% respecto al año anterior, es decir, más del doble.

Por otro lado, la gran banca sí ha logrado, pese al contexto, incrementar sus ingresos en el pasado ejercicio. El margen bruto, que se toma de referencia como cifra de negocios de las entidades financieras, sumó en el pasado ejercicio 92.608 millones de euros, un 1,5% más que un año antes. Bankinter y BBVA, los que más crecen. El balance de los intereses (la diferencia entre lo que tienen que abonar los bancos y los que cobran) también crece, un 2,5%, hasta los más de 65.000 millones de euros.