La ministra de Fomento, Ana Pastor, ha asegurado hoy que Aena cerrará el año con un resultado bruto de explotación (ebitda) superior a los 1.500 millones de euros y que el Gobierno ha conseguido “darle la vuelta a las cuentas” de la entidad con un saldo de caja positivo de 600 millones.
En el Congreso de los Diputados, la titular de Fomento ha afirmado que las noticias son buenas ya que se han abierto más de 300 nuevas rutas, habrá un récord de visitantes extranjeros que entran en España por los aeropuertos españoles, las reservas para las Islas Canarias han aumentado un 15 % y todos los aeropuertos turísticos están creciendo.
“Estamos haciendo esfuerzos, sin su ayuda, para que haya compañías que vengan a Barajas y al resto de España”, ha contestado la ministra al portavoz socialista en la Comisión de Fomento, Rafael Simancas.
Asimismo, ha señalado que el Gobierno ha administrado con “eficacia” el “desastre” de la gestión que se encontró en Aena, que tenía una deuda de 14.000 millones, un déficit tarifario de 850 millones y un saldo de caja negativo de -600 millones.
Por otro lado, ha señalado que el PSOE tenía en marcha la privatización de los aeropuertos de Madrid y Barcelona con una licitación del 90,05 % del capital social de las dos sociedades concesionarias de ambos aeropuertos: Barajas con 5.527 millones de deuda y un resultado después de impuestos de -95 millones, y El Prat, con un pasivo de 1.700 millones y un resultado después de impuestos de -21 millones.
“Ustedes iban a externalizar los aeropuertos y el Estado se quedaba con la deuda y además se destruía la mayor fortaleza de Aena, los aeropuertos en red”, ha asegurado Pastor, que ha añadido que el PSOE “en materia aérea no está para dar ejemplos a nadie”.
Simancas ha asegurado que con el Gobierno actual se suben las tasas y bajan los tráficos un 8 % de operaciones hasta octubre, una política aérea que va a perjudicar a los españoles.
Además, ha subrayado que Aena es más que un negocio, es un instrumento estratégico para dinamizar la economía y atraer turistas, por lo que ha reclamado que el Estado mantenga siempre el control mayoritario del gestor aeroportuario.