Ha sido el primer trimestre sin Gobierno en España y la economía siguió creciendo. Lo hizo gracias al consumo de los hogares y al gasto de las administraciones públicas. Y a pesar de que la inversión sufrió un frenazo.
El Instituto Nacional de Estadística ha confirmado que el PIB creció un 0,8% en el primer trimestre del año y encadena once trimestres seguidos de subidas. En términos interanuales, aumentó un 3,4%. El consumo de las familias creció un 0,9% respecto al trimestre anterior y el gasto de las administraciones públicas lo hizo un 0,8%. En ambos casos son cifras superiores a las que se registraron a finales de 2015.
También la inversión se incrementó en los primeros tres meses del año, un 0,4%, aunque, a diferencia del consumo y el gasto, su crecimiento se moderó respecto al trimestre precedente. La inversión en construcción, por ejemplo, cayó 1,5 puntos debido tanto a la vivienda como al mercado de otros edificios y construcciones.
Las cifras de Contabilidad Nacional muestran también que la remuneración media por asalariado sigue sin recuperarse: bajó un 0,3%. Entre los últimos nueve trimestres, la remuneración ha caído en cinco y crecido en cuatro, aunque muy levemente, sin llegar nunca al 1%. En el último año se crearon medio millón de puestos de trabajo, algo que ya había mostrado la Encuesta de Población Activa.
Menor contribución de la demanda nacional
El crecimiento del 0,8% del PIB iguala los registrados de los dos trimestres previos (tercer y cuarto trimestre de 2015) y se sitúa dos décimas por debajo del 1% conseguido entre abril y junio de 2015, hasta ahora el ritmo trimestral de avance más elevado desde que la economía española inició la recuperación.
La tasa interanual del PIB, por su parte, se situó en el 3,4% en el primer trimestre del año, una décima menos que en el trimestre anterior. El consumo de los hogares creció un 3,7% interanual en el primer trimestre, dos décimas más que en el trimestre anterior, mientras que el de las Administraciones Públicas subió un 2,6%, lo que supone 1,1 puntos menos que en el cuarto trimestre de 2015.
El INE ha explicado que la desaceleración en la variación interanual del PIB es consecuencia de una menor contribución de la demanda nacional, que aportó 3,8 puntos en el primer trimestre, tres décimas menos que en el trimestre anterior. Por su parte, la demanda externa redujo dos décimas su aportación negativa al PIB, desde los -0,6 puntos del cuarto trimestre de 2015 a -0,4 puntos en el primer trimestre de este año.
Con el repunte trimestral del PIB entre enero y marzo se encadenan ya once trimestres de avances, mientras que la tasa interanual acumula nueve trimestres en positivo, con crecimientos superiores al 3% en los últimos cuatro trimestres.
En el primer trimestre, el empleo aumentó a un ritmo del 3,2% en términos interanuales, dos décimas más que en el trimestre anterior, lo que se traduce en la creación de 533.000 empleos equivalentes a tiempo completo en un año. En relación al último trimestre de 2015, el empleo creció en el primer trimestre de este año un 0,9%, tres décimas más.