En primavera, la economía creció un 0,8% respecto al primer trimestre del año, una décima más de lo previsto en los cálculos preliminares. Esta subida afianza la recuperación, al menos estadística, de la economía española que es una de las que más crece en la zona del euro (Alemania reportó ayer una mejora del 0,4% en el mismo trimestre). El dato recoge la evolución del PIB durante el segundo trimestre consecutivo sin Gobierno y deja ver que, por ahora, la falta de acción política apenas se traduce en la marcha económica.
Con respecto al mismo trimestre del año anterior, la economía mejoró un 3,2%. El dato que se conoce hoy se puede analizar bien midiendo la evolución trimestre sobre trimestre o sobre el mismo periodo del año anterior. Ante la particularidad de estos dos trimestres, en esta ocasión observar la foto respecto al mismo trimestre del año anterior es significativa para evaluar el impacto de la ausencia de Ejecutivo.
Así, respecto al mismo periodo de 2015, el gasto público creció un 0,1%. Es la tasa más baja desde el último trimestre de 2014. Aunque la inercia del gasto público es grande, esta tasa muestra una contención por parte de las Administraciones (en algunos trimestres de 2015 el gasto público crecía por encima del PIB).
En términos trimestrales, esto es, en comparación con el primer trimestre del año, el gasto público cayó un 1,6%. Dentro del reparto del gasto público a lo largo del ejercicio, es habitual que en los tres primeros meses del año haya un crecimiento fruto del traslado de partidas de diciembre que luego se modera en el segundo trimestre. Con todo, la caída del gasto público, en un trimestre en el que además se celebraron elecciones generales, es llamativa.
En definitiva, la mejora económica se ha apoyado en estos seis meses en el consumo privado y también en la inversión, que ha sufrido una mejora reseñable. Año a año, la inversión crece un 4%, una tasa moderada respecto a las que se habían cosechado en los primeros trimestres de la recuperación pero aún sólida. Además, y frente al primer trimestre del año, crece un 1,3%.
La partida que más crece dentro de la inversión es la de compra de maquinaria no destinada a transporte.
El consumo privado y las exportaciones mejoran a buen ritmo, con una especial mejora de la contribución de la demanda exterior. El efecto del arranque de la temporada turística récord permea estos datos de uno de los trimestres más atípicos de la historia política. La industria es uno de los sectores que mejor evoluciona en estos tres meses.
En términos de empleo, se añadieron 484.000 empleos en el trimestre pero el INE destaca que se desacelera el número de horas trabajadas.