Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, en nuestro país hay ya más madres de 40 que de 27 años, lo que supone que el 10% de los bebés que nacen en territorio español lo hacen de una mujer que ya ha entrado en la cuarentena.
Aunque las causas de la maternidad tardía son variadas y pueden ir desde razones laborales y económicas a la elección personal, es imposible entender este fenómeno sin la mejora en las técnicas de reproducción asistida que han permitido aumentar la ventana de la fertilidad femenina.
Además de la fecundación in vitro existen otras técnicas como la biopsia embrionaria que sirven para descartar alteraciones cromosómicas. “Está demostrado que en las mujeres mayores de 40 años el 80 % de los embriones que se generan presentan algún tipo de anomalía. Por eso, hacer un estudio de los embriones en un ciclo de fecundación in vitro con óvulos propios acorta los tiempos hasta conseguir el embarazo, y acorta también la tasa de aborto” en palabras de la Dra. Belén Acevedo, responsable de la Unidad de Reproducción Asistida del Hospital Universitario Rey Juan Carlos.
Ser madre con óvulos propios
Uno de los mitos más extendidos de la maternidad tardía es aquel que asegura que solo se puede ser madre cumplidos los 40 por un proceso de ovodonación, algo que no es cierto.
“Una mujer con cuarenta años se puede embarazar de forma espontánea, el problema es que la mayoría de las pacientes en torno a estas edades tienen más dificultad para conseguir embarazo y tienen más riesgo de aborto y alteraciones cromosómicas en la descendencia, pero no es imposible” afirma la Dra. Acevedo quien contesta en este episodio a otros mitos sobre la reproducción asistida.
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