Los kits perfectos para iniciarse en el mundo del placer y el autoconocimiento

María Sanz

Que cada vez hablamos más libremente sobre sexo es un hecho; que el tema de la masturbación se trata con mayor naturalidad, también. Ahora bien, lo que todavía se sigue quedando en un segundo plano es el resultado que suele desprenderse de ambas prácticas: el placer. No es que sea un tabú, es que quizá no sabíamos que había que dedicar tiempo a averiguar qué es lo que nos gusta, cómo llegar hasta ello o cómo pedirlo.  

“Cuando se habla de educación sexual, normalmente se enfoca desde salud, enfermedades de transmisión sexual o anticoncepción. Aún no hemos llegado al punto en el que se enfoque en el placer”, explica Beti Badia, psicóloga y sexóloga de Platanomelón, la marca líder del sector en juguetería erótica y bienestar íntimo. 

No es que consideren que haya que erradicar de la conversación los riesgos que se derivan de la práctica sexual. Para nada, pero sí que argumentan que, es importante abordar la educación sexual desde una perspectiva más amplia. Si el primer contacto que se tiene con el sexo tiene que ver con el peligro o la culpa, es probable que la principal fuente a la que acudan los adolescentes sea poco fiable. “Lo único que veo cuando busco sexo en internet, porque quiero saberlo o porque mis padres o mi escuela solo me han hablado de ITS (Infecciones de Transmisión Sexual) y anticoncepción, es el sexo a través de las pantallas, que ya sabemos qué referentes son”, describe Badia.

Ante esto, otorgarle al placer el protagonismo que se merece se vuelve una necesidad y el principal objetivo de Platanomelón y Sex Education con el lanzamiento de sus dos nuevos kits. La calidad de nuestras experiencias sexuales va a depender principalmente de saber comunicar aquello que nos gusta y lo que no. Es por eso, que autoexplorar el propio placer mediante el uso de juguetes eróticos como los que forman parte de los kits de Sex Education y Platanomelón, ayudarán a mejorar nuestro autoconocimiento y conocer qué nos da placer. 

De hecho, como indican en el estudio Una revisión rápida del placer sexual en la primera experiencia sexual publicado en The Journal of Sex Research, “los individuos con capacidad para formular lo que significa el placer para ellos tienen más probabilidades de experimentar placer en la primera relación sexual”.

En ese sentido se pronuncia Badia, “Es importante entender que somos nosotros los responsables de nuestro propio placer y no la persona con la que estamos teniendo sexo (…) Para que una relación sexual con alguien sea beneficiosa y la puedas disfrutar, tenemos que comunicar qué nos gusta”.

Y es que, el placer es una vivencia subjetiva que, además, tiene beneficios para nuestra salud. En el plano físico, tener un orgasmo se traduce en fortalecer la musculatura del suelo pélvico y en un chute de hormonas que nos ayuda a mantener la homeostasis. A nivel psicológico, el placer nos ayuda a conectar con nuestro cuerpo y a mejorar nuestra autoestima. “Si le damos placer al cuerpo, nuestro cuerpo entiende que también le queremos y, al final, es el que nos permite hacer todo lo que hacemos en nuestro día a día y tenemos que estar agradecidos”, indica Badia.

Si a esto le añadimos el hecho de que cuando hablamos de placer sexual no hablamos únicamente de orgasmos, saber qué nos gusta se pone todavía más interesante y pasa necesariamente por el autoconocimiento, al que se llega a través de la autoexploración y la autoestimulación.

“La clave para autoconocernos es mirar, tener curiosidad, darnos mimos y masturbarnos, aunque no sea el objetivo llegar al orgasmo, pero ver qué nos gusta y qué no, según los movimientos, la presión,etc.”, describe Badia.

Observar nuestros genitales con la ayuda de un espejo, explorar sus zonas y relieves con nuestros dedos, dibujar mapas visuales en los que se identifiquen las partes, son algunas de las prácticas con las que ir conectando con nuestro cuerpo y a las que podemos añadir los juguetes sexuales. “Pueden ser muy buenos aliados en estos ejercicios de masturbación para jugar con la presión, con los patrones de movimiento, con la temperatura incluso”, indica Badia.

Por ello, Platanomelón ha lanzado su nueva colección inspirada en la serie de Netflix Sex Education compuesta por el Kit Sex Education, Conócete para vulva y el Kit Sex Education, Descúbrete para pene.

El primero de ellos, Conócete, incluye, entre otros productos, la bala vibradora Bali con cuatro fundas complementarias para usar con esta bala que permiten una estimulación distinta. “La bala es el mejor primer juguete porque, al ser pequeño, nos permite ir descubriendo qué zonas dentro de la vulva son más o menos erógenas. Además, no es solo para la penetración: una bala la podemos introducir o no y es igual de placentera”, describe Badia, quien añade que también puede usarse, en otras zonas erógenas que se encuentran fuera de nuestros genitales.

En el caso de Descúbrete, está compuesto por el estimulador prostático Charlie, y el masturbador para pene Ova con efecto frío, calor o vibrador. Con este kit, Platanomelón busca contribuir a derribar mitos en torno a la sexualidad masculina, que es más compleja de lo que tendemos a creer. “Hay zonas erógenas de las personas con pene o tipos de estimulaciones que no están experimentadas por un tema de tabú”. De ahí ese estimulador prostático pensado para disfrutar de la penetración anal con independencia de la orientación sexual que cada uno tenga y el masturbador para pene, que ofrece formas de estimulación distintas a lo que sería la masturbación con la mano y que permite descubrir sensaciones nuevas. 

La utilidad de estos productos como primer juguete sexual es indiscutible, pero, al ser básicos y de gran ayuda para el autoconocimiento, no solo están pensados para personas que se están iniciando en el sexo, sino para todas aquellas dispuestas a experimentar con su sexualidad. Y es que, lo de autoconocerse es algo que hay que mantener en el tiempo. “Nunca dejas de autoconocerte porque la sexualidad es dinámica, es cambiante y lo que ayer te encantaba, hoy no te gusta”.