Euskadi, capital del jazz

Decía Gershwin, un histórico compositor estadounidense, que el jazz es como la vida misma, pues es mejor cuando se improvisa. Este es uno de sus mayores atractivos. Los afroamericanos del siglo XVIII se reunían en plazas para celebrar las cosechas al son de una música sin partituras ni ensayos que, con el tiempo y por variadas influencias, evolucionó hasta ser jazz. La palabra ‘jazz’, de hecho, se usaba para denotar viveza y energía. Estas dos sensaciones, acompañadas de la improvisación que tanto caracteriza al género, inundarán en julio Getxo, Vitoria-Gasteiz y San Sebastián, que se visten de gala para recibir a las estrellas más brillantes del panorama musical y también a las promesas más ilusionantes. Verano en el País Vasco es sinónimo de jazz.

Getxo sube el telón

Los guechotarras inaugurarán la temporada el 3 de julio. Muxikebarri, a un paso de la ría, acogerá el 43.er Festival Internacional de Jazz. Acompañada de su saxofón, la joven barcelonesa Andrea Motis, de tan solo 24 años, subirá el telón. Han pasado ya tres años de la publicación del primer trabajo en solitario de una artista que, pese a su juventud, ha tocado codo a codo con artistas internacionales, de la talla de Wycliffe Gordon o Jesse Davis.

También interpretarán en la localidad vizcaína los franceses de Jon Urrutia Trio y Girls in Band Quintet, una amalgama de artistas vascas y catalanas. Los encargados de cerrar la cita de este año 2019 serán, el 7 de julio, los navarros del cuarteto de Juanma Urriza. El batería navarro, formado en Musikene, navega, con versatilidad, por géneros variados que fluyen desde el jazz hasta el pop-rock, transitando también por el ska y el blues.

Viraje en Vitoria-Gasteiz, con un nuevo equipo al timón

La aventura comenzó en el año 1977. En la primera edición, el chico polideportivo de Landázuri recibió, durante tan solo dos días, a los ganadores del concurso amateur del Festival de San Sebastián. Los años ochenta y noventa fueron testigos del despegue y los dos mil, de la consolidación. Papel protagonista en este proceso desempeñó Iñaki Añua, principal responsable de que llegasen a la ciudad músicos de renombre mundial.

Ahora, con la despedida de este gran nombre tras cuatro décadas de incesante trabajo, el nuevo equipo, con Iñigo Zárate y Alberto Ibarrondo al frente, ha de reinventar el cartel para, entre el 16 y el 20 de julio, atraer a nuevo público a la capital alavesa. Con ese objetivo en mente, se acercarán artistas de renombre como Gregory Porter, ganador de un Grammy, o Regina Carter. El polideportivo de Mendizorroza, el Teatro Principal y el jardín de Falerina, una de las novedades, serán la zona cero de esta cuadragesimotercera edición.

También cogerán los micros Jorge Drexler, Omara Portuondo, el quinteto de Marta Sánchez e Iñigo Ruiz de Gordejuela, entre otros, mientras que Benny Golson mostrará su maestría con el saxofón. Apuestas variadas —con una mayoría de músicos que no han pisado hasta ahora los tablones del Principal ni el parqué de Mendizorroza— de una nueva dirección que pretende estar a la altura en su debut. El precio de los abonos oscila entre los 125 y los 175 euros, aunque también es posible hacerse con pases de día desde los 20 euros.

San Sebastián, una apuesta por las mujeres y lo de casa

Dos son las principales cartas que juega la organización de esta edición del Jazzaldia: una amplia porción del cartel para las mujeres y el impulso a los artistas de la casa. El festival lo inaugurarán Joan Báez y Jamie Cullum. A la soprano estadounidense, cuya voz es una de las más respetadas del folk, la avala una carrera de más de seis décadas, durante las que ha interpretado y hecho versiones de algunos de los músicos y grupos más destacados del panorama internacional: desde los Beatles hasta los Rolling Stones, pasando por Paul Simon o Stevie Wonder. Por su parte, el británico Cullum guarda una estrecha relación con la ciudad costera y vuelve a ella para desplegar su carisma y energía vocal.

Las mujeres, que a lo largo de la historia del jazz han tenido que remar a contracorriente para poder disponer de la voz que merecían, tendrán un papel destacado entre el 24 y el 28 de julio. Además de Báez, sobresalen la gerundense Silvia Pérez Cruz y la onubense Martirio. También estará en San Sebastián Diana Krall, la destacada pianista canadiense. Asimismo, se apuesta por la marca casera, ya que la organización reserva diez actuaciones para grupos que saldrán de un proceso de elección cuyo objetivo es dar un impulso a los jóvenes talentos guipuzcoanos.

La música sonará por toda la Bella Easo, que, en años anteriores, ha llegado a recibir más de 150 000 espectadores. El Kursaal y la plaza de la Trinidad serán el epicentro de la 54.ª edición de este terremoto musical. Los abonos para asistir a los conciertos rondan los 100 euros.

Tierra de jazz

Lo que empezó en corros improvisados en los Estados Unidos se expandió después para colonizar todas las esquinas del globo. Ahora, durante el verano, las capitales del jazz están en los tres territorios históricos vascos. En julio, la voz de Getxo, Vitoria-Gasteiz y San Sebastián la ponen los mejores del género. Decía ni más ni menos que Louis Armstrong que si alguien tiene que preguntar qué es el jazz, jamás podrá llegar a saberlo. El jazz hay que escucharlo, sentirlo. La oportunidad de hacerlo, al alcance de la mano.