Euskadi estrena legislatura esta semana y PNV y PSE-EE exhibirán su sintonía a expensas de cerrar el nuevo Gobierno
Tras la sesión constitutiva del martes, Bakartxo Tejeria del PNV seguirá como presidenta del Parlamento una cuarta legislatura y el PSE-EE tendrá la vicepresidencia mientras negocian reeditar la coalicion tras las europeas
Este martes, 14 de mayo, el Parlamento Vasco celebrará la sesión de apertura de la decimotercera legislatura desde la aprobación del Estatuto en 1979. Habrán pasado 82 días desde el último pleno, un jueves en el que Iñigo Urkullu no estuvo presente y en el que, por la tarde, celebró un Consejo de Gobierno extraordinario para convocar las elecciones que se celebraron hace unas semanas, el 21 de abril. La sesión estará revestida de muchos formalismos, servirá para reelegir para una cuarta legislatura a Bakartxo Tejeria como presidenta (hace ya tiempo que es la más longeva en la historia en ese cargo y seguirá sumando años) y mostrará que el pacto entre el PNV y el PSE-EE para reeditar el Gobierno de coalición no está cerrado pero sí al menos engrasado, ya que empezarán el nuevo cuatrienio votando de la mano.
El de este martes será un primer paso para la nueva etapa política que afronta Euskadi, aunque habrá que esperar hasta después de las elecciones europeas del 9 de junio para que se celebre la investidura de Imanol Pradales. De momento, el futuro lehendakari ocupará un escaño en la bancada del PNV y la del Gobierno seguirá encabezada por Urkullu. El socialista Iñaki Arriola, además, estrenará su nueva condición de vicelehendakari segundo al haber sustituido estando ya en funciones a Idoia Mendia, que será candidata en las europeas. Ya no estarán Joseba Egibar del PNV y Carmelo Barrio del PP, con más de tres décadas en el legislativo y muchos años como portavoces de sus respectivos partidos. Tampoco los veteranos socialistas José Antonio Pastor y Txarli Prieto. O Leire Pinedo, una de las primeras en llegar cuando se creó EH Bildu. Se constatará igualmente la desaparición de Podemos.
La constitución de la Cámara la dirigirá una Mesa de edad liderada por la más veterana de los 75 electos. El honor recaerá en la socialista Miren Gallástegui, de 63 años. No es inhabitual que pronuncien un breve discurso. Presumiblemente, serán cinco las mujeres que compongan este órgano transitorio compuesto por los tres aforados de más edad y los dos más jóvenes. La menor seguirá siendo Eraitz Sáez de Egilaz, de EH Bildu, que lo fue en 2020 a los 23 años y que ahora repetirá con 27, aunque su nueva compañera Edurne Benito del Valle tiene la misma edad.
La sesión elige la nueva Mesa en tres votaciones. Primero se vota la presidencia. El PNV desea que continúe Tejeria, que llegó al cargo a la vez que Urkullu a Ajuria Enea, allá por 2012. Nunca nadie había ocupado la segunda responsabilidad institucional de la comunidad autónoma más de dos legislaturas y ella encarará la cuarta. Tras el escrutinio, PNV y EH Bildu tienen los mismos escaños y la coalición quería la presidencia con Eva Blanco, secretaria general de EA. Por ello, el concurso del PSE-EE será ya decisivo y se da por hecho que los socialistas votarán de la mano de los nacionalistas, una primera señal de que el bipartito volverá a ser una realidad.
A cambio, el PSE-EE logrará en la segunda votación la vicepresidencia primera, según tienen confirmado los socialistas. El PNV votará a un candidato aún no confirmado y se impondrá de nuevo a Blanco. EH Bildu segunda fuerza, quedará relegada a la vicepresidencia segunda. Ocurrió de modo idéntico hace cuatro años. Blanco, de hecho, estará en la Mesa por tercera vez.
Y habrá una tercera votación. Se elegirá a dos secretarios para la Mesa. La novedad es que EH Bildu contará con una segunda plaza. La elegida será la propia Sáez de Egilaz. Es la primera vez que la coalición tendrá a un parlamentario que no proceda de EA en este órgano de Gobierno. Le acompañará otro elegido por la mayoría gubernamental, presumiblemente el peneuvista Jon Aiartza, aunque esto será debatido por el Euzkadi Buru Batzar este lunes. No es un puesto menor ya que durante cuatro legislaturas el PNV ha tenido ahí Iñigo Iturrate, con gran influencia en la vida diaria del Parlamento.
Con estas votaciones, PNV y PSE-EE retendrán también una posición de mayoría en la Mesa con tres de los cinco puestos. El PP ha protestado al entender que no respetará la “pluralidad” al no cederle un asiento cuando, en 2020, Gustavo Angulo de Podemos sí lo tuvo con menos escaños y votos. Sin embargo, para que el PP entrara tendría que pactar con PNV y PSE-EE o con EH Bildu, dos escenarios imposibles políticamente. Sumar y Vox, de su lado, solamente tendrán un escaño y compartirán el grupo mixto.
Después queda por despejar quiénes serán los portavoces. El PNV, sin Egibar, tiene en la recámara guipuzcoana a Markel Olano, que se estrena en Vitoria después de tres legislaturas no consecutivas como diputado general, aunque en la campaña ha emergido la figura del alavés Joseba Díez Antxustegi. En el PSE-EE la incógnita es si Eneko Andueza querrá dar el salto al Gobierno como vicelehendakari o seguirá con un perfil más crítico en la Cámara. EH Bildu ya ha explicado que Pello Otxandiano será el presidente del grupo, el jefe de la oposición, y Nerea Kortajarena la portavoz en el día a día. El PP no ha concretado quién acompañará a Javier de Andrés ante la baja de Barrio.
El arranque de la legislatura tiene también otras implicaciones más allá de la política. Es un clásico cada cuatro años que haya que hacer obras para adaptar los despachos al nuevo tamaño de los grupos. En pura teoría, hay que agrandar las salas de EH Bildu, PSE-EE y PP, reducir la del PNV y habilitar un espacio pequeño para Sumar y Vox. Las obras ya están presupuestadas. Hay una partida reservada de 116.976,97 euros (más IVA). El concurso se puso en marcha a finales de marzo, antes de las elecciones, y aún no se ha adjudicado, según el portal de transparencia de la institución.
También ha habido una contratación por la vía de urgencia de 120 nuevos ordenadores portátiles para sus señorías ya que fracasó la compra que se intentó a finales de año. Costarán unos 1.500 euros por unidad. Los parlamentarios -y sus asesores- tienen derecho a una “oficina móvil” que incluye también teléfono y conexión de datos. Asimismo, perciben un complemento a su salario para desplazamientos -menor para los electos en Álava, más alto para Bizkaia y el máximo para Gipuzkoa- que nunca se suspende aunque no haya plenos o aunque los beneficiarios compartan coche. Y a ello se le añade una tarjeta de telepeaje.
Después de la constitución, hay una serie de pasos previos a la investidura estipulados en el reglamento. Todos tienen que ver con las incompatibilidades. El calendario ya definido lleva hasta el 23 de mayo, el día previo al arranque de la campaña de las europeas. De ese modo, estará todo listo para poder celebrar la investidura después del 9 de junio. PNV y PSE-EE, formalmente, comenzaron a negociar el 29 de abril. Lo siguen haciendo de modo discreto. Esta semana, ambas partes han coincidido en que las cosas van “bien”, en palabras del propio Pradales, aunque es una evidencia que los socialistas quieren más peso en el futuro Gobierno compartido.