El movimiento feminista convoca una huelga contra el “negocio” de los cuidados el 30 de noviembre en Euskadi y Navarra

Durante la mañana del pasado 8 de marzo el movimiento feminista de Euskal Herria dio un paso más en sus reivindicaciones y anunció una huelga que acordarían con “movimientos populares, sociales y sindicales”. “Exigimos el derecho universal a los cuidados y que estos dejen de ser negocio. Caminamos hacia huelga feminista general, y este 8 de marzo es el primer paso”, aseguraron y tras el lema “se os acabó el negocio de los cuidados. Revolución de los cuidados para cambiarlo todo”, anunciaron en aquel momento su intención de realizar una huelga general, sin ofrecer más información.

La fecha de la convocatoria se ha mantenido en silencio hasta este martes por la noche, cuando edificios de Bilbao, Vitoria, Pamplona, Arrasate-Mondragón y Llodio han sido iluminados con un mensaje escrito en euskera: “30 de noviembre, huelga general feminista”. No es casual la elección de los edificios iluminados, pues son el Hospital Santiago en Vitoria, la sede de la Diputación de Bizkaia y de la Tesorería General de la Seguridad Social en Bilbao y el Ayuntamiento de Pamplona, mientras que, en Arrasate-Mondragón, la proyección se ha realizado en la fachada de 'Musakola zentroa', un centro de día privado recién creado en el municipio por Aita Menni, propiedad de la Congregación de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, que cuenta con financiación de la Diputación de Gipuzkoa y que también gestiona el Hospital Psiquiátrico ubicado en el barrio Gesalibar, uno de los mayores centros privados de salud mental de Euskadi y que lleva más de cinco años sin renovar el convenio de una plantilla de 500 trabajadoras que componen el hospital.

“Vamos a salir a la calle por un sistema de cuidados público y comunitario, por la construcción del derecho colectivo al cuidado. Contra la privatización y mercantilización, en defensa de los derechos de las mujeres que vivimos en condiciones inaceptables realizando las tareas de cuidado y en sectores feminizados, para exigir responsabilidad a quienes mantienen el sistema actual. Se trata, en definitiva, de una lucha por unas vidas dignas, por el derecho a ser cuidadas a lo largo de toda la vida y a cuidar con igual compromiso”, han anunciado las integrantes del movimiento feminista en un comunicado difundido junto con las imágenes de los edificios iluminados.

Según han informado, su objetivo es “provocar cambios” en el actual sistema de cuidados hacia un modelo “público y comunitario” que materialice el “derecho objetivo al cuidado que pondrá las vidas de todas en el centro”. “Paso a paso, venimos a revolucionar el actual sistema de cuidados”, han concluido desde el movimiento feminista, tras asegurar que su lucha es una lucha por “la dignidad” de las personas y “a favor de un derecho colectivo de al cuidado”