La vieja Ezker Batua de Madrazo se acerca al 'frente amplio' de EH Bildu

Ezker Batua (EB) fue la marca de IU en Euskadi durante años, pero también un proyecto personalista dirigido por Javier Madrazo. Explotó su influencia con poca representación dentro del tripartito con PNV y EA y con Juan José Ibarretxe como lehendakari. Madrazo llegó a ser consejero. Pero, tras aquella etapa, que incluyó el escándalo de las negociaciones de la Diputación de Álava, el proyecto se partió. El sector vinculado con el PCE y con el apoyo federal -la corriente conocida aún hoy como Ezker Anitza- retomó el control de la marca de IU y ahora está coaligado con Podemos. En 2012, EB llegó a contraprogramar en las autonómicas a IU -las siglas significan lo mismo en euskera y en castellano- y dejó a ambos sin representación una legislatura. Ya antes, en 2011, una escisión encabezada por Oskar Matute llamada Alternatiba fundó lo que hoy es EH Bildu. Una década después, Madrazo y otros notables de aquella EB como Isabel López Aulestia y José Navas, el candidato a lehendakari en 2012, se están aproximando a EH Bildu, que busca ensanchar su proyecto buscando un 'frente amplio' de izquierdas y soberanista.

Madrazo está anunciado para un acto este jueves en Bilbao acompañando al propio Arnaldo Otegi y convocado bajo el lema “Somos mayoría. Ezkerra eraikiz” ('construyendo la izquierda'). Ambos son los protagonistas de un coloquio. “La iniciativa responde a varios posicionamientos públicos previamente expresados semanas y meses antes, coincidiendo a favor de un encuentro de la izquierda”, indican en la convocatoria. “Estamos intentando ampliar EH Bildu. Nos estamos acercando a sectores y otros sectores se nos acercan”, añaden fuentes de la formación.

La semana que viene se repetirá un formato similar en Donostia. La coalición va logrando también las adhesiones de otras voces de la izquierda no abertzale como el magistrado Manuel Díaz de Rábago, Paul Nicholson o, sobre todo, la exconsejera por el PSE-EE Gemma Zabaleta, que comparecerá con Otegi en esta segunda sesión. La que fuera titular de Empleo y Políticas Sociales con Patxi López protagonizó una etapa en la que se endureció la RGI y se recortaron las cuantías un 7%, como recordó la coalición hace un mes en el Parlamento. En el pasado ya había formado parte de iniciativas como Ahotsak y se dio de baja del PSOE en 2017 tras la aplicación del 155 en Catalunya, apoyada por los socialistas, a raíz de la declaración de independencia. Otro de los firmantes fue gobernador civil en Bizkaia con Felipe González, Daniel Arranz.

La mayoría de ellos han expresado en artículos de opinión posiciones cercanas a EH Bildu. “Necesitamos un proyecto político, social y económico para la Euskadi del futuro que apueste por lo público, por la justicia y la igualdad, por la dignidad laboral, aquellos valores que se defienden desde la izquierda y más aún en un contexto de crecimiento desmedido de las derechas ultras que compiten cada día en el campo de la radicalidad”, escribieron. Y añadieron: “Toca pactar qué marco de soberanía propia y de capacidad de decisión debe tener Euskadi”. Otra tribuna -“Una izquierda de país”- mencionaba que “la pujante izquierda independentista de hoy y aquellos otros sectores posicionados en el federalismo o el confederalismo no debieran tener problemas para encontrarse en un proyecto de consenso”.

Fuentes de Alternatiba indican que, como partido, secundan la estrategia de ensanchar la coalición de EH Bildu a todos los espectros de la izquierda y entienden como positivo la búsqueda de nuevos referentes. Sin embargo, algunas voces internas aún recuerdan las fuertes discrepancias que mantuvieron en el pasado con la gestión de Madrazo y que provocaron las escisiones y los conflictos. En 2015, en una entrevista en 'Deia', Madrazo se dijo miembro de un grupo llamado “Ezkerra-Berdeak” -durante años el partido se llamo “Ezker Batua-Berdeak” y explicó que se había acercado al entonces floreciente Podemos. “Soy un miembro más de Podemos y no aspiro a ningún cargo, esa etapa está cerrada”, declaró. Y añadía: “Podemos se trata de un movimiento ciudadano muy interesante, potente, con gente formada, como mucho criterio”. Desde IU, en cambio, optan por no hacer comentarios sobre Madrazo.