La organización agraria UPA-UCE ha reivindicado unos precios justos para el aceite de oliva tras haber sufrido una caída del 44 por ciento en un año. Advierte de que el olivar es un sector no sólo emblemático, sino imprescindible para el mantenimiento de la vida en las zonas rurales de prácticamente toda España.
Sin embargo los agricultores siguen sin recibir precios justos por sus aceitunas y el aceite de oliva en origen sigue por debajo del coste de producción.
Si se tienen en cuenta las previsiones de la próxima campaña, que no llegarán al millón de toneladas, “no podemos entender cómo es posible que los precios hayan caído en un año un 44 por ciento”. Esto se traduce en una media de 1,99 euros/kilo, a diferencia de los 3,75 euros/kilo del año pasado, denuncia el secretario general de UPA-UCE Extremadura, Ignacio Huertas.
A su juicio esta situación no se debe al funcionamiento normal del mercado, ya que se trata de un sector en el que la demanda crece por encima de la oferta, sino “a maniobras especulativas que buscan ganar cuota de mercado hundiendo los precios en origen”.
A ello suma las prácticas comerciales “desleales” de las cadenas de distribución por utilizar el aceite de oliva como producto reclamo, “tirando por tierra la imagen de un producto de excelencia y contribuyendo a la tendencia a la baja de los precios”.
Según UPA-UCE, la medida del almacenamiento privado debe tener su repercusión “a corto plazo” y traducirse en una recuperación de las cotizaciones en origen, que según los últimos datos se sitúan sobre los 2,13 euros/kilo para el virgen extra, según el Ministerio de Agricultura, “lejos de los 2,70 euros en los que se sitúan los costes de producción”.
La organización agraria advierte además de que la caída del consumo de aceite de oliva por parte del consumidor español es una “preocupante” realidad, frente a la que el sector está promoviendo una campaña de fomento de su consumo.
“Y no solo porque queramos vender más y mejor aceite, que también, sino porque la caída de ventas de este producto es una realidad preocupante para España a nivel social, sanitario y nutricional”, mantiene UPA-UCE.
Según subraya, el aceite de oliva mantiene “vivos y cuidados” los territorios rurales, es un producto clave de la dieta mediterránea y es un “arma de primer orden” contra el despoblamiento.
La organización agraria UPA-UCE ha reivindicado unos precios justos para el aceite de oliva tras haber sufrido una caída del 44 por ciento en un año. Advierte de que el olivar es un sector no sólo emblemático, sino imprescindible para el mantenimiento de la vida en las zonas rurales de prácticamente toda España.
Sin embargo los agricultores siguen sin recibir precios justos por sus aceitunas y el aceite de oliva en origen sigue por debajo del coste de producción.