La Diputación de Cáceres ultima un tercer plan de lucha contra la exclusión financiera con el objetivo de que ningún pequeño municipio se quede asilado de este tipo de servicios, según ha apuntado este martes, su presidente, Carlos Carlos.
Este anuncio ha coincidido con la firma de un convenio con 38 ayuntamientos cacereños y la entidad Cajalmendralejo para instalar cajeros automáticos, oficinas bancarias o ambas servicios en estas localidades.
Según Carlos, ya hay diez o doce municipios interesados en acogerse a la nueva convocatoria, destinada igualmente a municipios de menos de 20.000 habitante y, que pretende garantizar estos servicios en los pequeños municipios, pues “el que no lo tenga, la Diputación de Cáceres va a hacerlo”.
Así, el borrador de presupuestos de la Diputación para 2023 contempla una partida de medio millón de euros para el tercer plan, cuyo precedente cuenta con una inversión presupuestaria provincial de 1.594.000 euros.
El fin es subvencionar directamente a los ayuntamientos parte de los costes de instalación de oficinas o la provisión de servicios de cajeros en sus localidades, con el compromiso de la entidad bancaria de mantenerlos al menos cinco años
Los 38 municipios firmantes, en los que en 12 se instalarán ambos recursos, cajeros y oficinas, se suman a los 35 que participaron en el primer plan de 2018, todos hasta entonces sin bancos, por el cierre de estos servicios, y muchos pequeñas poblaciones de cientos de habitantes.
“La prioridad ha sido la atención personalizada y directa para luchar contra esta exclusión, prestando el servicio a la carta, según lo que han solicitado los ayuntamientos”, ha expuesto Carlos, quien ha agradecido el compromiso de la entidad Cajalmendralejo para “mantener el servicio financiero”, a su juicio, “esencial” para luchar contra la despoblación.
A la financiación del plan, cuya aportación va a partes iguales entre Diputación, ayuntamientos y Cajalmendralejo, un tercio cada uno, se unirá la Junta a través de un próximo convenio con Diputación para que la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural “cofinancie parte del tramo local”, aún sin importe estimado, ha apuntado Carlos.
Uno de los pueblos beneficiados es Torrecilla de los Ángeles, con 740 habitantes, y cuya alcaldesa Mónica de Cáceres, ha valorado la iniciativa para abrir un cajero u oficina, pues “aunque sea un día a la semana presencial nos viene muy bien”.
“Unicaja se fue hace un par de meses de la localidad y tenemos que poner algo, muchos abuelos tenemos que llevarlos en coche a diez kilómetros, a la oficina más cercana”, ha dicho la regidora.
Para el alcalde de Santibáñez el Alto, Rubén Francisco, es un “servicio muy necesario” en una población “bastante envejecida”, de poco menos de 500 habitantes, y que algunos de ellos “no saben utilizar un cajero”. “Para sacar dinero tenemos que desplazarnos veinte o treinta kilómetros, es un trastorno grave. No podemos permitir que nuestros pueblos se queden sin servicios si queremos atraer población”, ha sentenciado.
Ahora, su pueblo dispondrá de un cajero automático y una oficina para atención presencial un día a la semana y de esta forma evitar ir a localidades como Montehermoso, la más próxima con cajeros.