Las obras de la futura fábrica de celdas de baterías de litio de Badajoz arrancarán el próximo marzo, para lo cual se espera que el proyecto ejecutivo y ambiental estén tramitados en unos seis meses.
El presidente de la empresa Phi4tech, promotora de la iniciativa, Alejandro Ayala, ha explicado durante su presentación que el próximo martes se presentará el proyecto básico en el Ayuntamiento de Badajoz con el objetivo de iniciar la primera fase de esta planta, que estará ubicada en la Plataforma Logística del Suroeste Europeo.
La intención es finalizar esta fábrica de supercondensadores de almacenamiento energético en diciembre de 2023, con una producción de 600.000 unidades al año, lo que la convertirá en una de las instalaciones de este tipo más importantes de Europa. Los supercondensadores se utilizan, por ejemplo, para gestionar la energía producida por un parque eólico o solar para que a la industria asociada llegue exactamente siempre la misma intensidad.
La primera fase del proyecto se complementará con la construcción de un centro “de referencia europeo” en investigación y desarrollo de nanomateriales para su uso en almacenamiento energético.
Durante la presentación también se ha referido a la fábrica de cátodos en Cáceres, en relación a la cual es imprescindible la materia prima, el litio, por lo que “siempre se ha condicionado la viabilidad de esta fábrica a los permisos de extracción de la mina de Cañaveral”, que la compañía entiende que “avanzan adecuadamente”. En este sentido, respecto al proyecto minero de litio en Las Navas de Cañaveral, está previsto obtener la concesión de explotación minera, permisos medioambientales, municipales, de gestión de agua y el resto de autorizaciones a finales de este año o principios de 2023.
En cuanto a la mina de Aguablanca (Monesterio), incluida también dentro del proyecto integral de almacenamiento energético que desarrolla la firma, la empresa “está lista para reabrir de forma inmediata” con la previsión de los 350 empleos “cuando se finalicen los trámites administrativos y se esté a pleno rendimiento”. En la actualidad “se trata todo este procedimiento” con el Gobierno central, pues es la única infraestructura de este tipo en la región aún de titularidad estatal, de ahí que se haya planteado que pasase a la comunidad “en el objetivo de tener un trato más directo y avanzar más rápido”, ha explicado Ayala.
En este sentido, el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, ha afirmado que la Junta mantendrá una reunión este mes con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico para abordar este asunto porque más allá de la administración responsable lo fundamental es que el proyecto “se haga”, ya que “no se puede tener a medio mundo mirando para acá pendiente de que se cumplan estos trámites o aquellos”.
La Administración regional “no tiene inconveniente, si así lo estima el Gobierno, en tener la competencia en esta mina igual que se posee en el caso del resto”, ha dicho Vara.