Un centenar de personas, entre vecinos, fuerzas de seguridad y emergencias, han reanudado este jueves la búsqueda de la mujer que desapareció en Hornachos, en el centro de la provincia de Badajoz, la noche del martes.
La mujer, que tiene 59 años, vestía mallas deportivas oscuras, camiseta de manga corta rosa y zapatillas de deporte; se llama Francisca Cadena Márquez, mide 1,62, pesa 53 kilos, es rubia y tiene los ojos verdes.
Al seguir siendo un día laborable el número de vecinos que participaban en el operativo se ha reducido, por lo que ha pasado de las 200 personas de ayer al centenar, ha informado el responsable de Emergencias de Cruz Roja Badajoz, Víctor Domínguez.
El operativo está formado por 50 efectivos de la Guardia Civil, Cruz Roja y Protección Civil, y cuenta con una unidad canina y un helicóptero del Plan de Lucha contra Incendios (INFOEX), entre otros medios.
Domínguez ha indicado que hoy se rastrean con más detalle algunas de las zonas que ya inspeccionaron ayer, sobre todo aquellas en las que se pueda refugiar una persona o caerse.
También buscarán a la mujer por zonas nuevas y usarán algunas motos para llegar a lugares complicados de la sierra.
En principio, si el tiempo no lo impide, la búsqueda se prolongará hasta las ocho de la tarde, con un parón para comer.
Salió para entregar una niña pero no volvió
Según explica el alcalde de Hornachos, Francisco Buenavista, la última vez que se vio a esta vecina fue en la noche del martes, cuando salió de su casa para entregarle a un amigo de la familia su hija pequeña, de la que se había estado haciendo cargo durante la tarde.
Según el relato de esa persona, guardia civil de profesión, después de dejarle a la niña, Francisca retomó el camino de vuelta a su casa, distante unos 60 metros, pero no llegó a ella.
Por este motivo, su hijo, al ver que ya era de noche y su no madre no estaba en casa, llamó a este amigo y a sus familiares por si estuviera en casa de alguno, con resultado negativo.
Fue entonces cuando se dirigió a la Guardia Civil para poner la denuncia por su desaparición.
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Francisca Cadena está casada y tiene tres hijos, uno de los cuales ha declarado que están convencidos de que ellas no se ha ido por su voluntad; otros familiares y vecinos apuntalan la convicción al decir que ella cuidaba de su madre enferma, de 90 años, así como de sus hijos “y no la dejaría a ellas, ni a ellos, por nada”.
La persona cuya hija cuidaba explica por su parte que la vio marcharse e incluso entrar en la calleja donde vivía.
Por otro lado fuentes del caso han afirmado que la desaparecía no padecía ninguna enfermedad que la hubiera llevado a desorientarse o perderse.
Dejó de saberse de ella sobre las diez de la noche del marte y dos horas después su familia denunció la desaparición; hubo batidas toda la noche, beneficiadas por la luz de la luna, incluso grupos en la sierra de la localidad, pero nada se ha encontrado.
La Guardia Civil no descarta ninguna posibilidad