Salieron a las calles con sus maletas para denunciar que las políticas europeas de migración y asilo, “de una gravedad sin precedentes desde el final de la II Guerra Mundial”, lejos de dar una respuesta en concordancia con la carta de Derechos Humanos “han puesto en grave riesgo a millones de personas, muchas de ellas mujeres y niños convirtiendo el Mediterráneo en la mayor fosa común en el mundo”.
Las maletas llenaron este viernes las calles del centro de Badajoz para reclamar una vez más a los gobiernos que acojan a las personas refugiadas que se comprometieron a recibir, tras firmarse el pasado 22 de septiembre el Programa de Asilo y Refugio de la Unión Europea (UE).
Más de 50 asociaciones, colectivos y plataformas de la ciudad de Badajoz apoyaron y participaron en esta iniciativa. Se trata de una iniciativa organizada por la Coordinadora Extremeña de ONGDs, CONGDEX, junto con la Plataforma del 0.7, Plataforma de Refugiados de Extremadura, con la financiación de la AEXCID, la acción de calle Maletas, Ningún ser Humano es Ilegal!.
Los organizadores denunciaron que acceder a los países europeos por tierra, se ha convertido en una tarea imposible, “encontrándose con una carrera de obstáculos insuperable”.
“Mediante alambradas erizadas de cuchillas, gases lacrimógenos, despojos de las escasas pertenencias, a merced de las mafias y la brutalidad de las fuerzas armadas, teniendo hacer frente al mal tiempo, viéndose obligados a hacer miles de kms. a pie, sufriendo las inclemencias del mal tiempo y viéndose retenidos temporalmente en asentamientos infrahumanos y siendo víctimas de las agresiones de grupos xenófobos, ante la pasividad de la policía e incluso siendo tiroteados”.
Critican igualmente el “afán deleznable” de librarse de ellos con el acuerdo con Turquía, “que además de ser vergonzoso e ilegal, pone en mayor riesgo a estas personas hacinándolas en un país donde no se respetan los derechos humanos”.
Entre otras cuestiones, reclaman a la UE que invalide el acuerdo con Turquía, y que habilite vías legales y seguras para que los refugiados no tengan que arriesgar sus vidas.
Instan a las autoridades europeas a que vigilen particularmente la protección y el decoro de las mujeres y los niños, los más vulnerables en este tipo de situaciones. También a detener la carrera armamentista y crear una estructura de actuación rápida y eficaz en los conflictos, arbitrando los medios para una solución pacífica de los mismos. Así como garantizar la protección de las Organizaciones y personas que apoyan a la población civil.
A su juicio es indispensable llevar ante el Tribunal Penal Internacional a las facciones que bombardean Hospitales, que contaminan el agua para el consumo humano y actuar ante el bloqueo de ciudades enteras que impiden el abastecimiento de la población civil. Además de propiciar la convivencia y la cooperación entre la población local y los que necesitan refugio y acogida, del mismo modo que apostar por una política europea y presupuestaria común de apoyo a los refugiados y migrante.
Al Gobierno español reclaman que retire su apoyo al acuerdo U.E. –Turquia y que agilice sin más demora la acogida de las personas refugiadas proveyendo a su asentamiento y reubicación.
También que respete escrupulosamente los derechos humanos en la frontera Sur, (especialmente en las fronteras de Ceuta, Melilla y la costa marroquí) y el resto de las fronteras europeas.
Abogan por penalizar ejemplarmente las conductas y mensajes xenófobos, discriminatorios, racistas o violentos hacia dichas personas y llevar a cabo acciones específicas de información y sensibilización sobre la situación de emergencia actual y sus causas.
Así como reforzar la política de integración con un Plan que apueste por la convivencia, el diálogo intercultural y la gestión positiva de la diversidad.
Creen indispensable evitar las migraciones causadas por conflictos armados provocados, y el expolio de sus recursos naturales mediante, la Cooperación Internacional al Desarrollo para que no tengan que emigrar de sus países de origen para buscar una vida digna y un desarrollo sostenible.