“No me niego a pagar una vivienda, pero no tengo ingresos”
Jenny Amarillo Bautista se acaba de incorporar a la protesta, frente a la casa de Monago en Badajoz. Vecina de la barriada pacense de Suerte de Saavedra, tiene 28 años y tres hijos, de 10, 8 y 2 años.
Ha recibido una carta del juzgado conminándole a abandonar la vivienda en el plazo de 10 días. Vive en esta casa, propiedad de la Junta de Extremadura, desde hace 17 años. No tiene empleo, permanece a la espera de la renta básica y no sabe qué hacer ni dónde meterse. Reconoce que su situación es crítica.
Lamenta así que, en caso de quedarse sin un techo, los servicios sociales le quiten su derecho a ser madre. Mientas tanto, y sin ingresos, recibe ayuda de su familia, acude al banco de alimentos y a los comedores sociales. “Entiendo que hay mucha gente en mi situación, pero la mía es desesperada, no me pueden desahuciar”.
La vivienda fue adjudicada a su padre que, desde hace 8 años, ya no vive en ella y la Junta de Extremadura acusa a Jenny de “ocupación irregular”. Jenny debe 2.100 euros a la Junta de Extremadura por recibos de alquiler pero no puede pagarlo puesto que no tiene ingresos para ello. Hace cuatro meses dejaron de pagarle la renta básica de inserción.